+VIDEO | Entérate por qué sacaron a una mujer «a rastras» de un avión en EE.UU.
Agencias
La aerolínea estadounidense Southwest Airlines ha pedido disculpas a una pasajera que fue expulsada a rastras de un avión de la compañía el pasado martes.
La mujer, cuyo nombre no se ha hecho público, se había negado a abandonar la cabina pese a que, según informó ella misma a la tripulación, padece una alergia severa a los animales de compañía que podría haber puesto en peligro su vida.
Según informó la cadena NBC, la mujer comunicó a los auxiliares de vuelo que padecía una alergia al enterarse de que había animales a bordo. La tripulación le señaló entonces que debía abandonar el avión, ya que, de acuerdo con la explicación ofrecida posteriormente por la propia aerolínea, la pasajera no llevaba consigo el certificado médico necesario para viajar cuando existe un riesgo de muerte.
«Nuestras normas establecen que a un cliente sin certificado médico puede denegársele el embarque si ha informado de que puede sufrir una reacción alérgica que pueda poner en riesgo su vida, y no sea posible garantizar su seguridad cuando hay un animal a bordo», indicó un portavoz de la compañía, a través de un comunicado.
«Nuestra tripulación hizo repetidos intentos para explicar la situación a la cliente, pese a lo cual se negó a abandonar el avión, por lo que intervinieron las autoridades», añade.
El momento en que la mujer es expulsada del avión, ocurrido antes del despegue de un vuelo entre Baltimore y Los Ángeles, en EE UU, fue grabado en un video que pronto se hizo viral. En las imágenes puede verse a la mujer preguntando varias veces «¿qué estáis haciendo?», mientras dos agentes uniformados la sacan a rastras por el pasillo.
En declaraciones recogidas por la NBC y divulgadas por el portal 20mUSA, el autor del video, Bill Dumas, afirmó que la mujer dijo que sufría una «alergia mortal» a los perros, y que pidió que sacaran del avión a dos perros que iban a bordo.
De acuerdo con la versión de Dumas, cuando la tripulación informó a la pasajera de que no era posible sacar a los animales, la mujer pidió una inyección para aliviar los síntomas. Uno de los auxiliares de cabina le dijo entonces que necesitaban un certificado médico para poder administrar la inyección, documento que la mujer no tenía.
Dumas asegura que un piloto le propuso entonces salir del avión para que pudieran ponerle la inyección en un lugar apropiado, a lo que la mujer se negó.