Vender “lo viejo”, salvación para muchos marabinos en esta Navidad - 800Noticias
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Con información de Panorama

Jesús Luengo le iba muy bien con el negocio de vender franelas nuevas en diciembre, pero en los últimos dos años las ventas se vinieron a “pique” y decidió dejar a un lado la mercancía nueva y vender “lo viejo” que consiguió en su casa. Le fue mejor.

Ahora tiene frente a su casa un toldo con varias mesas donde vende desde ropa usada hasta herramientas. Los números le dan hasta para colocar una mesa con “todo a 1000”, cuyo aviso publicitario rememora aquellos años de bonanza económica cuando prosperó este tipo de negocio en diferentes centros comerciales de Maracaibo, cuando el bolívar tenía tres ceros menos.

“Me dediqué a esto por la ‘pelazón´. Años atrás yo vendía hasta 1000 franelas el 24 de diciembre y el año antepasado no vendí ni 50. Comencé a vender objetos usados que ya no utilizaba en mi casa y no me va mal. Como las ‘ventecitas’ mejoraron comencé a comprarle a los vecinos y a familiares y aquí estoy, sobreviviendo”, dijo el marabino que atiende su negocio en el sector Valle Claro.

Como Luengo muchas familias marabinas aprovechan al aumento de circulante en Navidad y  sacan para el frente de sus casas cuanto objeto sin uso tengan en el hogar, cuya venta genere unos ingresos extras en esta navidad, práctica que se ha convertido en la “salvación” de muchos.

Otros optan por trasladarse con su mercancía para venderlas en lugares habilitados para tal fin, como las conocidas “coroteras” que se han convertido en bazares muy populares gracias a las crisis.

“Todos los años me vengo a la ‘corotera´pues me deja buen dinerito para los gastos de Navidad y hasta para comienzos del año. La gente ya no le ‘para’ a que la prenda sea usada con tal que esté en buen estado y su costo sea accesible”, comenta Beatriz Fernández quien tiene una mesa detrás del mercado Periférico de La Limpia.

Como Beatriz, muchas familias aprovechan estas fechas para procurarse una entrada extra gracias a que conservaron guardado, quizás olvidados, muchos objetos y prendas que ahora les están ayudando a enfrentar la crisis.

 

 

 

 

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