Vargas Llosa justificó haber recomendado votar por Alejandro Toledo en 2001
EFE
El laureado novelista Mario Vargas Llosa justificó este viernes haber recomendado votar por Alejandro Toledo, detenido en Estados Unidos por un pedido de extradición, como presidente de Perú en el 2001 porque en ese momento «representaba la democracia» y una salida al régimen de Alberto Fujimori.
Durante un panel realizado en la Feria Internacional del Libro de Lima, el Nobel de Literatura admitió que recomendó «a todos los presidentes que hoy día son acusados de ladrones», entre los cuales citó a Toledo (2001-2006), Ollanta Humala (2011-2016) y Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018).
«¿Quién iba a pensar en ese momento que el señor Toledo iba a aprovechar el poder para robar?», expresó Vargas Llosa en referencia a las denuncias de un presunto soborno recibido de la empresa brasileña Odebrecht.
«En ese momento, Toledo representaba lo anti Fujimori, la negación de Fujimori, pues había que votar por él, nos equivocamos, pues quizás en ese momento había que salir del fujimorismo, esa era la primera prioridad y Toledo nos ayudó en ese momento», manifestó.
Vargas Llosa defendió que «en política, hay que elegir el mal menor, lo que uno cree que es el mal menor», aunque se puede equivocar.
Calificó al preso exmandatario Alberto Fujimori (1990-2000) de «dictador corrupto» y recordó que la Marcha de los Cuatro Suyos, que encabezó Toledo contra la reelección de Fujimori, fue «algo hermoso, que nos levantó el ánimo».
El expresidente Toledo afrontará desde una cárcel en Estados Unidos el proceso judicial que podría culminar con su extradición a Perú, según lo resuelto este viernes por el juez federal Thomas S. Hixson, del Distrito Norte de California.
El magistrado consideró que el exmandatario podría abandonar Estados Unidos en caso de salir en libertad, y recalcó el hecho de que cuando fue detenido el pasado martes se halló en su casa un maletín con 40.000 dólares en efectivo.
Toledo compareció con traje completamente rojo de presidiario pero sin esposar, no realizó declaraciones en ningún momento -toda su defensa corrió a cargo del abogado Joseph Russoniello- y mantuvo una actitud cabizbaja y sombría durante los aproximadamente cuarenta minutos que duró la sesión en la que se le negó la libertad bajo fianza.
Toledo está acusado de haber recibido hasta 35 millones de dólares de Odebrecht a cambio de favorecer a la empresa brasileña en sus negocios en Perú cuando él aún era presidente, y ha pasado los últimos dos años prófugo de la Justicia peruana en EEUU., donde reside en la localidad de Menlo Park (California, cerca de San Francisco).