Varela a Maduro: Hablar en la vía pública siempre es una opción
EFE
El presidente panameño, Juan Carlos Varela, no descartó hoy reunirse con su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, para tratar de solucionar la reciente crisis bilateral, que incluye la suspensión de la conexión aérea entre ambos países y el retiro de sus respectivos embajadores.
«Los jefes de Estado siempre nos encontramos en los diferentes eventos que se dan en el mundo. Este es un tema puntual que lo que tiene que hacer el presidente Maduro es no afectar más a la población de Panamá, Venezuela y la región (…) En la vida pública hablar siempre es una opción», indicó Varela.
El mandatario panameño respondió así durante un evento en el interior del país a la pregunta de si se reuniría con Maduro, quien esta semana dijo públicamente que estaba dispuesto a sostener un encuentro con Varela para solucionar los «problemas» bilaterales.
«Hay diferencias políticas, sobre todo con las elecciones del 20 de mayo», en las que Maduro busca la reelección y que Panamá no reconocerá, «pero tenemos que poner siempre a los ciudadanos de nuestros países primero y no afectarlos», declaró Varela.
«Hay más de un millón de venezolanos viviendo en países cercanos a Venezuela que usan la conectividad aérea de Panamá para ver a sus familias», recordó el gobernante panameño.
La Cancillería panameña reconoció el jueves en un comunicado que tiene interés en normalizar las relaciones diplomáticas y comerciales con Venezuela y confirmó que altos representantes de ambos países mantuvieron en días pasados una reunión en República Dominicana que concluyó sin acuerdo.
En ese fallido encuentro participaron la vicepresidenta y canciller panameña, Isabel de Saint Malo, y vicepresidente venezolano de Economía, Wilmar Castro, entre otras autoridades, apuntó el ministerio del país centroamericano.
El inicio de las fricciones diplomáticas se remonta al 28 de marzo cuando Panamá pidió a los bancos radicados en el país intensificar la supervisión financiera sobre 55 venezolanos políticamente expuestos, entre ellos el propio Maduro, por ser considerados de «alto riesgo» en materia de blanqueo de capitales.
El Gobierno venezolano anunció como represalia días después la ruptura de relaciones comerciales por 90 días prorrogables con un centenar de empresas panameñas, entre ellas Copa Airlines, una de las pocas aerolíneas internacionales que seguía operando en Venezuela y que dejó de hacerlo el pasado 6 de abril.
Panamá, por su parte, respondió anunciando la suspensión, a partir del próximo 25 de abril y por 90 días prorrogables, de las actividades de transporte de pasajeros y carga de las aerolíneas venezolanas en territorio panameño.
Panamá forma parte del denominado Grupo de Lima, integrado por una docena de naciones del continente que desconoce la Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela y la convocatoria anticipada de comicios presidenciales.
“Los jefes de Estado siempre nos encontramos en diferentes eventos que se dan en el mundo. Este es un tema puntual que lo que tiene que hacer el presidente Maduro es no afectar más a la población de Panamá, Venezuela y la región”, dijo a TVN Noticias.
El mandatario panameño reconoció las diferencias políticas entre las dos partes, por las que llamó a la reflexión y no perjudicar a los ciudadanos.
“Hay más de un millón de venezolanos viviendo en países cercanos a Panamá que usan esta conectividad para ver a sus familiares y amigos, no se pueden tomar decisiones que afectan a las personas”, remató.