Unicef repartirá millones de mascarillas y otros suministros contra COVID-19
EFE
Unicef anunció este viernes que ha adquirido millones de mascarillas, trajes, termómetros y otros suministros en gran demanda por el coronavirus para repartirlos en países necesitados durante los próximos meses.
La agencia de la ONU para la Infancia explicó que está trabajando con alrededor de un millar de proveedores y avanzó que, «a pesar de las extremas condiciones del mercado», ha logrado disponibilidad de grandes cantidades de material clave para los meses de abril, mayo y junio.
En concreto, Unicef podrá comprar 26,9 millones de mascarillas quirúrgicas, 4,8 millones de máscaras N95, 6 millones de monos, 7,1 millones de batas quirúrgicas, 1,5 millones de gafas protectoras y 29.000 termómetros de infrarrojos.
«Aunque la velocidad y tamaño del brote está creando innumerables desafíos, seguimos haciendo todo el esfuerzo para asegurar que los suministros de Unicef llegan a quienes lo necesitan cuanto antes», señaló en un comunicado Etleva Kadill, la directora de Suministros de Unicef en Copenhague, donde la agencia tiene su principal centro logístico.
La prioridad número uno, apuntó, es proteger al personal sanitario, los «héroes en primera línea» de esta batalla que están protegiendo a niños y familias.
Desde que surgió la enfermedad, Unicef ya ha distribuido entre otras cosas más de 4 millones de guantes, medio millón de mascarillas quirúrgicas y casi 100.000 del tipo N95, considerado el modelo óptimo para prevenir el contagio del coronavirus y muy demandado por los sanitarios.
Entre los países que se han beneficiado del material médico suministrado por la agencia de la ONU figuran China, Irán y Pakistán, mientras que próximamente recibirán envíos Corea del Norte, Venezuela, Palestina, Indonesia, Sudán del Sur, la República Democrática del Congo, Ucrania o Afganistán.
Unicef explicó que las crecientes restricciones en el transporte internacional impuestas para frenar el COVID-19 están complicando las operaciones.
El miércoles, la agencia solicitó a los donantes más de 650 millones de dólares para financiar su respuesta al coronavirus, una petición que se enmarca en una más amplia hecha por toda la ONU y que asciende a unos 2.000 millones de dólares.