Unicef denuncia la muerte de ocho niños en el campamento sirio de Al Hol
EFE
Unicef denunció este miércoles la muerte en menos de una semana de ocho niños de menos de cinco años en el campamento sirio de Al Hol, donde están recluidos decenas de miles de familiares de combatientes del Estado Islámico (EI).
Según un comunicado, los fallecimientos tuvieron lugar entre el 6 y el 10 de agosto, con cuatro de los menores muertos por problemas relacionados con malnutrición y el resto por deshidratación, fallo cardíaco, hemorragias internas e hipoglucemia.
“La muerte de cualquier niño es trágica. Lo es aún más cuando esa muerte se podía haber evitado”, señaló la directora ejecutiva de Unicef, Henrietta Fore, en la nota.
La responsable de la agencia de la ONU recordó que en Al Hol hay casi 40.000 niños de más de 60 países que no tienen acceso a servicios básicos y que están sufriendo la dureza del verano y el trauma de la violencia y el desplazamiento.
“La COVID-19, con las consiguientes restricciones de movimiento y medidas de cuarentena, está haciendo una situación crítica aún peor”, según Fore, que apuntó que recientes casos de coronavirus entre trabajadores del campamento han llevado a que se reduzca su número y se pongan en pausa algunos servicios de salud y educación.
Unicef está apoyando a los niños de Al Hol con suministros de agua, comida y productos sanitarios, entre otras cosas.
Sin embargo, Fore subrayó que es necesaria “una solución a más largo plazo” y defendió que los hijos de familias no sirias tienen derecho a ser protegidos con documentos legales, reunificación familiar y la repatriación a sus países de origen si va en su mejor interés.
“Todos los niños tienen derecho a ser protegidos de los devastadores efectos que la pandemia está teniendo en su supervivencia, aprendizaje y protección”, insistió.
Según cifras de los servicios humanitarios de la ONU, Al Hol alberga actualmente a unas 65.500 personas, de las que casi la mitad son iraquíes, un 38 % sirios y un 15 % -casi 10.000 en total- ciudadanos de terceros países.
En el campamento se internó principalmente a familiares de combatientes del EI capturados por las milicias kurdas de Siria en su avance contra el grupo terrorista en el noreste de Siria.
La ONU ha advertido repetidamente de la crítica situación humanitaria y del riesgo de que menores se radicalicen durante su estancia.
Aunque algunos países han repatriado a algunos de sus nacionales, otros se han resistido hasta ahora.