Un segundo caza ruso se estrella al no poder aterrizar en portaaviones
El País de España
Un avión de guerra ruso Su-33 se estrelló este lunes en el Mediterráneo oriental cuando aterrizaba en el portaaviones Almirante Kuznetsov, desplegado desde hace un mes frente a la costa de Siria, según un comunicado del Ministerio de Defensa. El piloto se salvó al salir eyectado de la aeronave. Es el segundo accidente que sufren las Fuerzas Aéreas rusas en la zona en 20 días, después de que el 14 de noviembre un caza ruso se precipitara contra el agua por un fallo técnico cuando se disponía a aterrizar en el mismo portaaviones.
El Almirante Kuztnesov entró en combate por primera vez el pasado 16 de noviembre, después de un polémico periplo al frente de una flotilla desde el Báltico hasta el Mediterráneo oriental.
Rusia y EE UU retomarán esta semana en Ginebra —entre el martes por la tarde y el miércoles por la mañana— las negociaciones para la retirada de los rebeldes del este de Alepo, según ha informado este lunes el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov. «Los grupos armados que se nieguen a abandonar el este de Alepo serán tratados como terroristas», ha asegurado Lavrov, que ha anunciado que Rusia apoyará, en caso de cerrar un acuerdo con Washington, la ofensiva del régimen sirio contra dichos grupos. Unos 8.000 combatientes quedaron aislados a finales de noviembre ante la ofensiva de las tropas de El Asad, que recuperaron un tercio del Alepo rebelde y partieron en dos el frente insurgente.
El todavía secretario de Estado de EE UU, John Kerry, ya ha enviado una propuesta de las rutas a utilizar y el calendario de retirada de las facciones rebeldes, según Lavrov. «Creemos que cuando los americanos propusieron una iniciativa para que los milicianos dejen Alepo oriental se dieron cuenta de los pasos que ellos y sus aliados, que tienen influencia sobre los rebeldes atrincherados allí, tendrán que tomar», ha asegurado. Una resolución de la ONU para un alto el fuego en Alepo sería «contraproducente» en este momento, según Lavrov, porque permitiría a los diezmados rebeldes reagruparse.