Un experto en desarme sustituirá como embajador en EEUU al polémico Kisyliak
EFE
Un veterano diplomático experto en desarme, Anatoli Antónov, sustituirá con toda probabilidad como embajador ruso en Washington al polémico Serguéi Kisyliak, «atrapado» en el centro del remolino de la supuesta injerencia rusa en las elecciones de EEUU.
Aunque el nombramiento oficial aún no se ha producido, medios de prensa, expertos y responsables políticos dan por hecho que el nuevo representante ruso ante la Casa Blanca será Antónov, una elección algo controvertida habida cuenta de que en 2015 fue incluido por la Unión Europea en la lista de sancionados por la política de Moscú hacia Ucrania.
Antónov era entonces viceministro de Defensa, por lo que, según Bruselas, estuvo implicado en el despliegue de tropas rusas en Ucrania y la anexión de Crimea.
«El anuncio sobre el nuevo embajador (en Estados Unidos) se hará pronto, cuando el presidente lo considere conveniente», respondió hoy el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ante la insistencia de los periodistas por confirmar al nuevo enviado a ese país.
Aunque Peskov no dio nombres, desde hace varios meses se habla de Antónov, actual viceministro de Exteriores, para reemplazar a Kisyliak, que el pasado 22 de julio regresó a Moscú después de nueve años en EEUU.
Según los medios oficiales rusos, la candidatura de Antónov como embajador en Washington ya fue aprobada en mayo pasado a puerta cerrada por el Comité de Asuntos Exteriores de la Duma (cámara baja del Parlamento ruso).
Y el embajador de EEUU en Moscú, John Tefft, examinó la semana pasada con el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, la designación de Antónov como el nuevo enviado diplomático ruso en Washington.
«Ayer me reuní con el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Lavrov, conversamos sobre la diferencia entre los nombramientos de embajadores en Rusia y EEUU, y en particular examinamos la designación de Antónov», dijo Tefft a los periodistas.
Para el viceministro de Exteriores Serguéi Riabkov, Antónov constituye «una elección óptima».
«El hecho de que haya trabajado seis años como viceministro de Defensa es una experiencia preciosa para su futura actividad en Washington. Y a ello se añade que es un magnífico negociador. Conoce muy bien nuestro sistema desde dentro, y esto le va a ayudar mucho en su trabajo», aseguró en una entrevista al canal Rossia 1.
También aclaró que «Anatoli Ivánovich Antónov, mi gran amigo, colega y compañero, no es un general. En el Ministerio de Defensa también los civiles que sirven allí llevan uniforme», afirmó, en referencia a algunas fotos del diplomático vestido de militar.
El casi seguro nuevo embajador, de 62 años, lleva treinta años en la carrera diplomática, desde que se graduó en 1978 en el Instituto de Relaciones Internacionales de Moscú (MGIMO).
Sin embargo, siempre ha estado especializado en cuestiones militares y de desarme y entre 2004 y 2011 fue director del Departamento para Seguridad y Desarme de la Cancillería, antes de ser nombrado viceministro de Defensa, donde era responsable de la cooperación tecnológico-militar.
En ese Ministerio permaneció hasta diciembre de 2016, cuando regresó a Exteriores como viceministro, lo que algunos expertos consideran que era un paso necesario para poderle nombrar después embajador.
Según expertos politólogos, Antónov tiene gran experiencia en mantener conversaciones con responsables de EEUU, especialmente en el campo del control armamentístico y actividades militares.
Fue el jefe negociador en las conversaciones para el nuevo tratado START en 2010, junto con la diplomática estadounidense Rose Gottemoeller, actual vicesecretaria general de la OTAN.
Antónov también encabezó el equipo ruso en 2015 y 2016 en las conversaciones con EEUU para evitar incidentes entre los aviones de ambos países en Siria.
Su postura firme en el tema del control de armas no excluye que esté a favor de mejorar las relaciones con EEUU en uno de los momentos más difíciles de estas, tras la victoria de Donald Trump y las insistentes acusaciones de que Moscú intervino a su favor.
Antónov se ha pronunciado a favor de que Rusia y EEUU trabajen juntos en la lucha contra el terrorismo, ya que -como dijo recientemente en una conferencia sobre ese asunto- «nadie puede sentirse seguro actualmente, nadie está viviendo en una isla».