UE abordará con Obama las consecuencias de «brexit» y líneas rojas en TTIP
EFE
Los presidentes del Consejo Europeo, Donald Tusk, y la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, abordarán este viernes en Varsovia con el presidente estadounidense, Barack Obama, las implicaciones de la decisión del Reino Unido de dejar la UE o las líneas rojas en la negociación del acuerdo comercial TTIP.
Tusk y Juncker mantendrán una «reunión de líderes» con Obama en los márgenes de la cumbre de la OTAN, que comienza este viernes en la capital polaca, indicaron hoy fuentes comunitarias.
Las discusiones, en las que la UE y EEUU subrayarán la «unidad transatlántica» y tratarán desafíos comunes como el crecimiento económico, la lucha antiterrorista o la crisis global de refugiados, pasarán por el «filtro del ‘brexit», reconocieron las fuentes.
«Por encima de todo la reunión será una importante oportunidad para reflejar las consecuencias globales y geopolíticas del referendo británico», señalaron.
Resaltaron que el Reino Unido es «una gran baza» desde el punto de vista de la Política Exterior y de Seguridad Común y que «no es algo que queramos perder a la ligera, hay que hacerlo bien».
En encuentro, al que asistirán además de Obama, Tusk y Juncker el secretario de Estado estadounidense, John Kerry; el jefe del Pentágono, Ash Carter; el representante de Comercio Exterior de EEUU, Michael Froman, y la alta representante de la UE para la Política Exterior y de Seguridad, Federica Mogherini.
En materia comercial, la UE expresará su voluntad de «intensificar los trabajos» en la negociación del TTIP, pero dejará claro que es necesario abordar «más que nunca las preocupaciones e intereses ofensivos que la UE tiene, por ejemplo, en licitaciones públicas», un ámbito en el que EEUU sigue sin hacer grandes concesiones.
«De otro modo, será muy difícil», apostillaron.
EEUU y la UE también se declararán unidos frente al problema «global» de la migración, abordarán la reciprocidad de visados y subrayarán la necesidad de que la Unión incremente su cooperación con la OTAN.
Precisamente Juncker y Tusk tienen previsto el viernes, tras la reunión con Obama, firmar con el secretario general aliado, Jens Stoltenberg, una declaración para acelerar la cooperación práctica en ciertas áreas e impulsar manuales sobre cómo actuar ante amenazas híbridas, en ciberseguridad y comunicaciones estratégicas, seguridad marítima y consolidación de instituciones de países terceros.
Esa declaración ha buscado el consenso tanto de los países de la UE que son miembros de la Alianza como de los que no lo son, a fin de tener en cuenta sus «sensibilidades» hacia esa organización militar.
Las fuentes reconocieron la existencia del «mismo problema estructural que ha supuesto una dificultad para la cooperación entre la OTAN y la UE desde el principio»: la «cuestión de Chipre por parte europea y de Turquía, por la aliada».
«Pero estamos en una situación política en la que las posiciones nunca han sido tan fluidas, o no lo han sido tanto por años, por lo que hay una oportunidad de hacer algo juntos», dijeron.
Destacaron que la experiencia de colaboración OTAN-Frontex para atajar la inmigración ilegal en el mar Egeo, «ayuda», así como «las conversaciones en marcha para llegar a un acuerdo» sobre la división de Chipre.
«La cooperación de la UE con la OTAN no va a ser fácil. Dicho eso, el tipo de progreso que hemos visto en el Mediterráneo en los últimos cuatro meses ha sido bastante excepcional y bastante inesperado», admitieron las fuentes.
Otras fuentes comunitarias indicaron que la OTAN podrá apoyar la operación naval europea «Sofía» contra las mafias migratorias en el Mediterráneo central por medio de compartir información sobre la situación en el área o de operaciones a nivel técnico.
También se plantea asistencia cuando «Sofía» empiece sus nuevas tareas asignadas de formar a guardacostas libios o vigilar el cumplimiento del embargo de armas a Libia.
La colaboración podría ser al estilo de la operación europea «Atalanta» en aguas del Índico contra la piratería, en la que los efectivos de la UE trabajan con otros internacionales, apuntaron.
Tusk, Juncker y Mogherini, asimismo, están invitados a participar en la cumbre de la OTAN en representación de la UE.