UCAB niega que haya censurado la película Tamara
Con información de El Nacional
José Virtuoso, rector de la UCAB, negó que se haya impedido mostrar el filme Tamara en esa casa de estudios. “Son informaciones falsas, tendenciosas y malintencionadas. Es una cosa inventada para perjudicar a la universidad con fines que desconozco Acá no se ha censurado nada por una razón muy sencilla: no existe ninguna solicitud al respecto. Toda actividad extracurricular debe seguir unos procedimientos. Esto no tiene sentido, porque además el rodaje se realizó acá. Esto nos tiene muy molestos. Tamara Adrián fue profesora de esta casa de estudios hasta que se jubiló. Además, ha venido en varias ocasiones a foros”.
Alejandro Silva, decano de la Facultad de Ciencias Humanas y Sociales de la Universidad Católica Santa Rosa, aseguró no tener conocimiento de lo ocurrido: “No estoy enterado, así que no tengo ninguna respuesta. Voy a una reunión en la que puedo pedir información. Podemos hablar luego”. Después no contestó las llamadas. Se le envió también un correo al rector, pero no respondió.
El tema de la censura en el cine venezolano genera preocupación en el medio, especialmente después de lo ocurrido con El Inca, cuya proyección fue prohibida en diciembre de 2016 semanas después de haberse estrenado.
No ha sido revelada a los medios la identidad de los estudiantes que quisieron exhibir la cinta en ambas universidades. Ramos afirma que temen represalias.
La directora Elia K. Schneider no quiso dar declaraciones a El Nacional sobre la denuncia, a pesar de haber dado ayer dos entrevistas en la radio.
Tamara estuvo en la cartelera desde el 4 de noviembre de 2016. Se convirtió en la producción nacional más vista en el país entre las estrenadas el año pasado con un total de 26.632 espectadores.
Protagonizada por Luis Fernández, la historia está basada en la vida de Tamara Adrián, activista por los derechos LGBT que en 2015 se convirtió en la primera diputada transgénero a la Asamblea Nacional.
La película de ficción muestra cómo el personaje tuvo que vivir con los prejuicios de su entorno, especialmente las críticas de alumnos y colegas en la universidad en la que impartía clases, donde incluso se debatió en un comité su permanencia en la institución.