Túnez intercepta en horas a más de 2.000 migrantes que partían hacia Europa
EFE
La Guardia Costera tunecina interceptó en un día a más de 2.000 personas migrantes que intentaron embarcarse en la ruta del Mediterráneo Central hacia Europa desde el litoral tunecino.
«Desde el miércoles hasta el jueves alrededor de las 2.30 a.m., (los guardacostas) frustraron 30 operaciones de cruce marítimo ilegal frente a Sfax y Chebba e interceptaron a 2.034 inmigrantes irregulares, incluidos nueve tunecinos», informó este jueves el portavoz de la Guardia Nacional.
Anoche, los guardacostas tunecinos rescataron cinco cuerpos de un naufragio, mientras al menos 28 personas continúan desaparecidas, todas ellas originarias del África subsahariana, después de que su embarcación precaria naufragara frente a la costa de la ciudad tunecina de Sfax.
Las fuerzas de seguridad tunecinas han interceptado a cerca de 10.000 migrantes desde principios de año frente a las 3.000 durante el mismo periodo del año pasado, según datos del Foro Tunecino por los Derechos Económicos y Sociales (FTDES).
«El clima de racismo y la campaña de detenciones del último mes han contribuido a un aumento de las partidas», aseguró el FTDES, en referencia a la persecución de la población subsahariana en el país después de que el presidente, Kais Said, les acusara de formar parte de un complot para cambiar la demografía y la identidad «arabo-musulmana».
Amnistía Internacional (AI) ha pedido a las autoridades investigar estos ataques y liberar a aquellos que han sido detenidos de manera arbitraria.
El Gobierno anunció medidas para facilitar la residencia legal y el retorno voluntario de quienes deseen salir, así como una línea telefónica de ayuda, tras las críticas internacionales que han condenado lo que consideran un discurso «racista» de las autoridades.
«La Organización Internacional de las Migraciones (OIM) está lista para continuar vinculándose con organismos gubernamentales claves e instituciones públicas en Túnez para mejorar las condiciones de vida de los migrantes, prevenir cualquier tensión social que pueda surgir de situaciones de exclusión y apoyar los esfuerzos para combatir todo tipo de discriminación y riesgo de explotación o abuso», declaró en plena campaña contra la población subsaharania.
Abogados Sin Fronteras ha registrado desde febrero al menos 840 detenciones, entre ellos estudiantes y solicitantes de asilo, en varias ciudades del territorio.
Cientos de personas de origen subsahariano, principalmente de Costa de Marfil y Guinea, se han acogido al retorno voluntario que han facilitado sus embajadas ante la campaña de acoso que vive esta población en el país magrebí, que ha alcanzado a tunecinos negros autóctonos.
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