TSJ cita en audiencia a otro alcalde opositor Carlos García
EFE
El Tribunal Supremo venezolano citó este viernes a declarar el 2 de agosto al alcalde opositor del municipio Libertador del estado occidental Mérida Carlos García Odón por desobedecer una orden judicial que le obligaba a impedir protestas antigubernamentales en su jurisdicción.
El procedimiento en marcha contra García Odón se ha aplicado ya contra varios alcaldes opositores, para algunos de los cuales se han dictado órdenes de apresamiento, inhabilitación y penas de prisión por no acudir a la audiencia con unos jueces a quienes no reconocen.
Dos de estos alcaldes son Gustavo Marcano, del municipio Diego Bautista Urbaneja de la ciudad de Lechería, en el estado oriental Anzoátegui, y Alfredo Ramos del municipio Iribarren en el estado Lara, en el oeste del país.
Marcano está en busca y captura desde el pasado martes, y Ramos fue detenido hoy dentro del ayuntamiento que hasta ahora regía por agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), que se lo llevaron entre gritos de «libertad» de los trabajadores municipales.
Las sentencias contra Marcano y Ramos -para quienes se dictaron penas de 15 meses de cárcel- ordenan que sean puestos bajo custodia del Sebin y recluidos en la sede del servicio de inteligencia en Caracas.
El Supremo aplazó esta semana la audiencia a otro alcalde opositor, el primer edil del municipio caraqueño Chacao, Ramón Muchacho.
La no comparecencia ante el tribunal es interpretada por el Supremo como una asunción de los hechos que se les imputan.
Tanto el Parlamento -de mayoría opositora- como la Fiscalía han dejado de reconocer la legitimidad de 33 jueces del Supremo por presuntas irregularidades en su nombramiento por el Parlamento aún dominado por el chavismo en diciembre de 2015.
El Supremo es acusado por estas dos instituciones enfrentadas al Ejecutivo del presidente Nicolás Maduro de servir de brazo judicial del Gobierno.
Por estas razones, el Parlamento nombró el pasado viernes 33 nuevos magistrados del Supremo, que han sido tachados de «usurpadores» por los jueces en ejercicio de este alto tribunal y por el propio Maduro, que adelantó que las fuerzas de seguridad detendrán «uno por uno» a todos los recién designados.
Tres de ellos ya han sido capturados por el Sebin, que les tiene presos en su custodia.