Todo sobre el gran peligro del metaverso para nuestra salud mental
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«Mientras el arte, la tecnología y el universo cosmético se lanza a la conquista del metaverso –una red de espacios donde los límites entre lo físico y lo digital se diluyen–, sus consumidores se enfrentan a la posibilidad de perfilar un alter ego virtual, con el consiguiente impacto para su expresión personal; el gran peligro del metaverso para nuestra salud mental», dice la comunicadora Violeta Valdés en Vogue.
Valdés explica que a mayoría de la gente aún no sabe con exactitud qué es el metaverso, y que algunos expertos en el tema consideran que faltan décadas para que exista un desarrollo completo, pero que ya se dan muchos de sus componentes básicos, como la tecnología de la realidad virtual y aumentada con la que trabajan algunos profesionales de la medicina estética. Sin embargo, los doctores advierten de los peligros del metaverso que acechan al paciente en la otra dimensión.
Según la doctora Jonquille Chantrey, del laboratorio británico Allergan, el metaverso ofrece dos grandes oportunidades para la medicina estética, en el terreno de la educación y la experiencia.
“Se podrán desarrollar espacios, clínicas y consultas virtuales donde el paciente estará presente, mientras que los expertos tendrán acceso a conocer más tratamientos específicos y personalizados».
“En términos de experiencia y entorno. Uno de los catalizadores de tendencias (así como una tendencia en sí misma) será la experiencia ampliada. Los pacientes podrán acceder a la clínica desde la comodidad de su hogar; sintiéndose más seguros, disponiendo de más opciones y hablando con diferentes centros. Es casi como hacer turismo médico virtual, una tendencia clave de los últimos años”, agrega la experta.
Pero ¿qué impacto tendrá el metaverso en la salud mental de los consumidores?
Los doctores coinciden en sus beneficios para las personas tímidas o con dificultades para expresarse, que se comunicarán mejor a través del avatar. Sin embargo, algunos profesionales piensan en el estado mental de los usuarios. «La lente digital ya ha propiciado algunos desafíos para quien siente su físico sometido a escrutinio en las videollamadas o advierte una gran diferencia entre su ser ideal (cómo se imagina) y su verdadero yo”. De hecho, el último informe de tendencias de Allergan destaca que una de las principales razones por las que la gente acude a clínicas de estética es ver fotos de sí mismos.
Por este motivo, el médico estético reconoce la enorme preocupación sobre los peligros del metaverso para la salud mental de los consumidores (esto es, de sus análogos físicos). Como ella señala, “está bien vivir en el espacio actual en 3D, aderezado con el apoyo de un sistema de realidad virtual y servirnos de herramientas que nos representen en este ámbito; pero luego nos enfrentamos a la realidad física, a personas que de verdad conocemos, y descubrimos una gran brecha entre nuestro avatar y nuestro aspecto real. El riesgo está en el avatar como expresión de uno mismo”, añade la doctora. Aunque parezca lejano, se trata de un problema ya tan extendido como las apps de retoque fotográfico.
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