¿Son peligrosos los bultos que aparecen en el paladar?
Agencias
Encontrar un bulto en el paladar puede asustar y preocupar a cualquier persona, pues no es un síntoma tan común como las aftas o un problema de caries, por el contrario, la mayoría de las veces lo relacionamos con un tumor maligno cuando existen otros 4 tipos de bultos que pueden aparecer en el paladar, ¿son peligrosos?
¿Qué es el paladar?
Vamos por partes, el paladar es la pared superior que se encuentra en el interior de la boca, el cual está formado por hueso revestido de una mucosa gruesa, surcos de color rosa pálido. Además posee glándulas salivales, vasos sanguíneos y nervios, describe el National Institutes of Health.
Algunas veces al comer, lavarnos los dientes e incluso jugar con la lengua podemos sentir un cuerpo extraño en el paladar, lo más recomendable es evitar tocarlo con los dedos sucios para no infectarlo en caso de que se trate de un absceso. Sin embargo, será tu dentista quien a través de exámenes y estudios complementarios realice un diagnóstico.
4 tipos de bultos que pueden aparecer en el paladar
Bultos en el paladar por lesiones
Cuando el paladar sufre una irritación en la mucosa se pueden presentar bultos que son inofensivos que se curan por sí mismos al cabo de unos días.
- Quemaduras: Tomar bebidas muy calientes pueden causar una quemadura en el paladar y desarrollar ampollas llenas de líquido que regularmente son dolorosas.
- Traumatismo: Un corte en el paladar puede provocar que se hinche el área y sentirse como un bulto que causa mucho dolor al tacto.
- Irritación crónica: Si utilizas una prótesis dental que no quede bien ajustada, es común que roce el paladar hasta causar irritación e hinchazón, lo más recomendable es ajustarla con la ayuda de tu dentista para evitar que siga lastimando.
Bultos en el paladar por infecciones
Algunas infecciones pueden ocasionar bultos en el paladar que normalmente son muy dolorosos, por ejemplo: los abscesos dentales.
- Absceso odontogénico: casi siempre aparecen cerca de una pieza dental, pues se debe a una infección en el diente que se propaga a otras áreas de la boca como el paladar, este tipo de bulto puede supurar y presentar un dolor insoportable, para eliminarlo se debe tratar la infección de origen.
- Herpes simple: puede provocar ampollas dolorosas agrupadas en forma de racimo en el paladar, las cuales están llenas de líquido y se revientan con facilidad. Sin embargo, aunque se curan al cabo de unos días son muy CONTAGIOSAS.
- Papiloma escamoso: estos pequelos bultos tienen el aspecto de una coliflor de color blanco o rosa pálido, los cuales son causados por el Virus del Papiloma Humano, aunque no causan dolor, se recomiendan extirpar con cirugía para evitar complicaciones como desarrollar cáncer de boca o garganta.
Hiperodoncia
Se trata de una condición en la que la persona desarrolla más dientes de lo normal y al no tener espacio suficiente pueden crecer en el paladar ocasionando la aparición de un bulto doloroso, afortunadamente se puede extraer con una cirugía ambulatoria.
Tumor maligno de las glándulas salivales
Se presenta a través de una masa de rápido crecimiento y puede ser muy doloroso, el cual puede afectar el habla, así como la capacidad de tragar alimentos. Aunque cualquier persona puede presentarlo, es más común en fumadores o personas que suelen tomar bebidas alcohólicas con frecuencia.
En cuanto al tratamiento, es necesario acudir con el especialista cuanto antes para iniciar un tratamiento quirúrgico o de quimioterapia.
¿Cuándo acudir con el especialista?
Aunque algunos no representan mayor riesgo, toma en cuenta que si presentas las siguientes señales, lo más adecuado es visitar a tu médico:
- Si hay presencia de mal aliento o un olor fétido en la boca
- Tienes dolor intenso que dura más de un día
- El bulto no desaparece dentro de las dos primeras semanas
- La protuberancia presenta úlceras que no cicatrizan
- El bulto cambia de apariencia y aumenta su tamaño
- Tienes problemas para respirar
Ahora que ya sabes por qué pueden aparecer bultos en el paladar, no dudes en acudir con un especialista para que determine la causa exacta y puedas comenzar con un tratamiento adecuado, recuerda que no es normal y tu cuerpo te puede enviar una señal de alerta.
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