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Varios gremios de la administración pública llamaron a manifestaciones en enero para exigir mejoras salariales. Tras varias semanas de protestas, sindicalistas denunciaron persecución por parte de las autoridades estatales.
Yuxcil Martínez, dirigente sindical, denunció este jueves persecución por parte de la Dirección de Contrainteligencia Militar (Dgcim), después de participar en protestas por mejoras salariales en la Siderúrgica del Orinoco (Sidor).
Martínez relató que llegó a su casa a principios de semana y temía por su detención. El sindicalista confesó que esperaba que la Dgcim atentara contra su vida. “No sé qué va a pasar de aquí a mañana”, agregó, según la Voz de América (VOA).
Días antes, Servio Gudiño, trabajador de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) aseguró que agentes de la Dgcim se apostaron fuera de su casa y le tomaron fotografías. Para el sindicalista, las intenciones “no son buenas”.
“No soy ningún delincuente para que ellos estén actuando de esta manera, estoy claro en mi derecho”, sentenció, quien aseguró que agentes de la Dgcim se ubicaron fuera de su casa y le tomaron fotografías.
Julio Marín, vocero sindical del estado Lara, denunció que sufre un “atropello constante” del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin). El sindicalista aseveró que los funcionarios iban a su residencia por defender los derechos de los trabajadores.
El presidente del gremio de enfermeros del estado Carabobo, Julio García, también sufrió “persecución y amedrentamiento”, según 120 organizaciones civiles, dado que cinco agentes intentaron ingresar a su vivienda el 20 de enero, supuestamente.
Ya son varios los sindicalistas que denunciaron persecución por parte de las autoridades. Sin embargo, los gremios niegan que vayan a cesar en sus protestas por incrementos salariales y mejoras en sus condiciones de trabajo.
