SEMANA SANTA 2014 Playas del litoral barloventeño abarrotadas de temporadistas
A diferencia de la temporada de Carnaval, en la que fueron muy pocos los visitantes a los balnearios del Barlovento, en esta ocasión fue todo lo contrario: hasta dos horas de cola soportaron los temporadistas para disfrutar de las playas en esta Semana Santa.
De acuerdo con las estimaciones de Protección Civil Miranda, en esta temporada se ha incrementado en más de 10% el número de visitantes a Barlovento, en comparación con el año pasado para la misma fecha. Hasta ayer se contabilizaron más de 100 mil vehículos hacia el eje de Higuerote y unos 66 mil para Río Chico, según informó Víctor Lira, director de Protección Civil de Miranda. Comentó que, en esta oportunidad, «hemos notado que se han movilizado más temporadistas a la playas de Río Chico que a las Higuerote, debido a que la carretera hacia allá no está tan congestionada como la de Higuerote».
Ayer los conductores que decidieron ir hacia el eje de Barlovento consiguieron cola desde el distribuidor Quemaito en Guatire, donde a primera hora de la mañana las autoridades habilitaron un canal de contraflujo para agilizar el paso; luego, para llegar hacia el municipio Brión, fue otro de los puntos con mayor congestionamiento y todos las calles del pueblo de Higuerote lucieron con mucha cola para llegar hasta las playas más visitadas, ubicadas en el sector Carenero.
Los comerciantes del centro de Higuerote coincidieron en que en esta ocasión había mayor afluencia de temporadistas que en Carnaval.
«A pesar de la situación económica y de las protestas que todavía siguen en algunas zona de Caracas hemos tenido buena temporada. Yo he vendido desde que comenzó la Semana Santa, lo que deje de vender en los días de carnaval, en los que no vino casi nadie», afirmó Carlos Sánchez, encargado de una panadería.
Los que si se quejaron fueron los propietarios de las licorerías que estaban cerradas por la aplicación de la ley seca.
Sin embargo, se observó que en las viviendas que están ubicadas a lo largo de la vías se ubicaron pequeños puestos que vendían hielo y bebidas alcohólicas sin ningún tipo de problemas.
Playas sin cupo
Ayer en los balnearios ubicados en Higuerote, a las 11 de la mañana ya no cabía ni una persona más y a pesar de que no fueron cerrados, como en otras oportunidades eran pocas las alternativas de servicios para los visitantes.
En Los Totumos los toldos y las sillas se agotaron y a los visitantes no le quedó otra opción que resguardarse debajo de los puestos de los Guardianes de la Playa o en los puntos habilitados para las autoridades que participaron en el operativo.
En Valle Seco, las duchas públicas fueron pocas para la cantidad de personas, por lo que las colas para ducharse eran de más de 50 personas.
También se quejaron de la falta de iluminación en la zona de Carenero donde se instalan las carpas, y donde desde hace tres meses no funciona el alumbrado público, según denuncian los comerciantes.
«Las cosas están más caras, pero hay más gente en las playas. Yo llegue hoy (ayer) y ya he gastado cinco mil entre habitación, comida y transporte. El año pasado gasté 2.500», afirmó César García, quien se encontraba en Los Totumos.
Mientras, en la playa Chocolate se concentraron más de mil familias en carpas que llegaron desde el Miércoles Santo y tiene planes de quedarse hasta mañana.
«Para venir hicimos una vaca y cada quien aportó 300 bolívares y somos 20 adultos y además nos trajimos la comida que íbamos a preparar desde la casa», afirmó Jenny Espinoza, quien vive en Ocumare del Tuy.
«Yo siempre acostumbro venir en Semana Santa, pero me traigo toda la comida y aquí solo compró algunas cositas, pero todo esta muy caro», se quejó Reina Marcano, quien vive en Petare y se instaló con su carpa en playa Chocolate.
Mientras, los comerciantes de las playas admitieron que las personas prefieren traerse su comida, por los altos precios de los productos del mar: el plato más económico se ubica en 260 bolívares.
FUENTE: EL UNIVERSAL