En 5 hospitales está cerrado el servicio de Anatomía Patológica
Es uno de los servicios más relegados en los centros de salud. El área de Anatomía Patológica está cerrada en el hospital Periférico de Catia, en el de Los Magallanes de Catia, en el hospital de Lídice, en el Vargas y en El Algodonal. En los pocos hospitales donde funciona como en el Clínico Universitario, el Domingo Luciani y el Hospital de Niños J.M. de Los Ríos lo hace con muchas limitaciones.
«Muchos tienen la idea equivocada de que el servicio de Anatomía Patológica es una especie de reservorio de cadáveres. Pero los pacientes con cáncer y sus familiares conocen bien la importancia del trabajo que aquí se hace, es como la mano derecha de la oncología», explica Francisco Mota, patólogo del Hospital de Niños.
En estos laboratorios se analizan las citologías cervicovaginales, se estudian los tumores para determinar si son malignos o benignos, que tipo de tratamiento va a necesitar el paciente y el pronóstico (la posibilidad que haya una buena o mala respuesta al tratamiento).
Hace más de diez años dejó de funcionar el servicio de Anatomía Patológica del hospital de Los Magallanes de Catia. Los equipos se fueron dañando y no se repararon, como un microtomo que quedó inactivo porque no tenía cuchilla. José Luis González, miembro de la Sociedad Médica, explica que las biopsias se envían a laboratorios privados como el de la clínica Méndez Gimón, la Nueva Caracas o el del edificio anexo del Hospital de Clínicas. «Los que no tienen recursos para pagar el estudio lo llevan al Clínico Universitario pero allí los resultados a veces se tardan un mes». En el Periférico de Catia las biopsias y cultivos también deben procesarse fuera de la institución ya que el servicio está cerrado desde marzo del año pasado por falta de personal e insumos.
A comienzos de agosto el técnico Jesús Matos se vio obligado a anunciar el cierre del servicio de Anatomía Patológica de El Algodonal pues con equipos caducos y falta de insumos no pueden garantizar que el material quede bien procesado.
En los últimos tiempos se veían obligados a reciclar el alcohol y hasta los restos de parafina de hace diez años ante la falta de insumos.
Mota explica que en el país no se produce casi nada de lo que se utiliza en Anatomía Patológica. «Son equipos, insumos y reactivos importados que se han visto afectados por las restricciones del dólar». Agrega que en la mayoría de los servicios hay equipos obsoletos, problemas de infraestructura (filtraciones, poca ventilación e iluminación) y fallas en la bio seguridad pues se trabaja con productos tóxicos y cancerígenos. En el J.M. de Los Ríos la mayoría de los equipos tienen más de 40 años y han recibido múltiples reparaciones. Otros como el de congelación que permite hacer un diagnóstico rápido de un tumor con el paciente en quirófano está dañado hace 13 años.
«La última compra de insumos que se hizo en el J.M. para Anatomía Patológica fue en 2009, por lo que ya tenemos muy poco», dijo Mota.
Fuente: El Universal
