Dios transforma vidas y llena de bendiciones
Miguel Ángel Moreno, llegó a la fundación Casa de Paso Oasis hace 5 años, a causa del alcohol se alejó de su familia, por más de 17 años, y explica que fue una grandiosa bendición que en Oasis le abrieran las puertas.
“Perdí empleos, amigos y mi familia por el alcohol, aunque ellos me aceptaban con mi condición sexual, igual yo me aleje de mis padres, porque quería hacer mi vida sin que nadie me dijera que hacer”, explicó Moreno.
Hoy, agradece a Dios por el cambio que dio a su vida, y señala “Quiero dar lo mejor de mí a Dios, porque le respeto y temo. Ha curado muchas áreas en mi vida, pero aún sigo metido de lleno en la oración para luchar contra mi homosexualidad y cuando yo deje de ver un hombre con deseo sé que ha terminado de hacer su obra en mi”.
Aclara, que aún le falta transformación y lo más importante para él es que Dios vea su cambio. “Sé que reconoce mi cambio porque ha bendecido mi vida grandemente”, apuntó.