Oposición venezolana suspende mesas de trabajo con gobierno y evalúa seguir en el diálogo
CARACAS, (AFP) – La oposición venezolana suspendió las mesas de trabajo del diálogo con el gobierno y evalúa si participará el jueves en una reunión con cancilleres de Unasur debido a la detención de estudiantes en los últimos días, dijo este martes a la AFP una fuente opositora.
«Ayer (lunes) se suspendieron las reuniones de las mesas de trabajo que se han constituido», dijo el coordinador de la delegación de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Ramón José Medina, que acude al diálogo iniciado hace un mes.
Medina explicó que la coalición opositora MUD también analiza si participará este jueves en la quinta reunión con una delegación del gobierno y los tres cancilleres de Unasur y el nuncio apostólico en Caracas, que participan como testigos de buena fe.
La asistencia a la reunión del jueves (que ya fue aplazada en dos ocasiones) «es uno de los temas que se está revisando. Nosotros hablaremos con los cancilleres, plantearemos esta posición y veremos qué decisión tomamos», indicó Medina.
La decisión de la MUD responde al «desalojo innecesario» y la «violencia registrada» durante la detención la madrugada del jueves de más de 240 estudiantes -la mayoría ya en libertad- en cuatro campamentos que instalaron en el este de Caracas y desmantelados con un gran operativo militar.
Asimismo, otros ocho estudiantes fueron detenidos la noche del lunes en el barrio caraqueño Las Mercedes, durante choques entre manifestantes radicales que exigen la liberación de los capturados y la fuerza pública, según la ONG Foro Penal.
«Estas acciones evidencian que el gobierno no quiere el diálogo, cuando se le pidió en varias oportunidades que cese esa posición tan agresiva. Estamos convencidos de que están creando un clima que no es propicio para las conversaciones», añadió el delegado de la MUD.
El gobierno socialista de Nicolás Maduro y el ala moderada de la MUD instalaron comisiones para revisar los casos de dirigentes opositores y estudiantes detenidos, y la conformación de una comisión de la verdad que investigue la violencia registrada en las protestas, entre otras.
«Hay un sector del gobierno que está dinamitando la posibilidad de que el diálogo tenga algún éxito», concluyó Medina.
Las manifestaciones dejan 42 muertos y más de 800 heridos desde que se iniciaron el 4 de febrero, en rechazo a la violencia criminal, la lata inflación y el desabastecimiento de productos básicos.