No podemos aceptar las captahuellas
Henrique Capriles, sostuvo que la aplicación de un sistema biométrico, anunciado por el Ejecutivo, será para controlar la compra de los alimentos. Reiteró que es una medida inconstitucional, por lo cual pidió sumar esfuerzos a toda la población para ponerle freno a su instauración.
«La ‘papahuella’ no la podemos aceptar, eso no tiene discusión. Su aplicación viola los derechos constitucionales de todos los venezolanos, ¿va el Gobierno a suspender esos derechos? Ningún venezolano tiene que aceptar esto. Si usted se gana el dinero con esfuerzo, a cuenta de qué, el Gobierno va a decidir si usted come pescado o pollo. Si a esto no se le pone un parado, entonces el Gobierno va a decidir en donde vive usted y cuántos hijos va a tener (…) Voy a andar en las calles y a cuanto bodeguero consiga le diré que no vamos a aceptar la ‘papahuella'».
En tal sentido, pidió rechazar la imposición de este sistema «¿La gente se va a dejar poner el dedo en el captahuella? Con este sistema, si usted compró pollo ayer, hoy no puede comprarlo, ¿Ustedes están conscientes de lo que quieren imponer? Ellos creen que con este sistema van a acabar la escasez y van a controlar el contrabando de los alimentos, al contrario, mientras más controles más contrabando».
Capriles sostuvo que el país necesita un cambio, que se tiene que dar de forma pacífica, democrática, electoral y constitucional. «Ya no aguantamos la crisis, estos señores que están en el poder, están llevando al país a una debacle económica. A nuestro pueblo le digo, no le tengan miedo a los enchufados, ténganle miedo al atraso, al retroceso y a la crisis, a eso si hay que temerle. La mayoría de nuestro pueblo no tiene empleo y los que tienen, no les alcanza el dinero. ¿Cómo hace una madre que no tiene ingreso fijo y tiene 5 muchachos para comprarles los útiles escolares?».
«La crisis se está llevando todo por delante», dijo Capriles durante la realización de una asamblea popular con vecinos de Brisas de Vista Linda, quienes solicitaron recursos al mandatario para construir o reparar sus viviendas. «Ayudo a todo quien lo necesite, pero lamentablemente, a Miranda también le golpea la crisis que vive nuestro país, si no paramos esto en seco, va a llegar un punto en que cuando las personas nos pidan ayuda, no vamos a poder darla, porque no hay materiales, las empresas cementeras las quebraron. Ya basta de crisis, no puede ser que un saco de cemento cueste 250 bolívares y no se consiga».
Durante la actividad en Santa Teresa del Tuy, el Gobernador entregó suministros para la instalación de un parque infantil, así como para la reparación de una cancha de usos múltiples que incluye reconstrucción de losa de piso, colocación de malla ciclón y puerta, pintura de la cancha, entre otros.
Información El Universal