Demolición de la Torre de David pierde fuerza
El destino de la Torre Confinanzas no puede estar aislado de la ciudad. Para quienes participaron ayer en la segunda parte del foro «Una torre para la ciudad o ¿una ciudad para una torre?» la decisión del Estado debe enfocarse en realizar un abordaje integral de la zona, tomando en cuenta las necesidades de los habitantes de Candelaria, San Bernardino y Sarría.
Francisco Garcés, ex presidente de Funvisis, aseguró que el problema con la torre no es técnico: “Cualquier situación que se presente en la estructura puede ser superada con la tecnología que existe”.
El Centro Financiero Confinanzas se construyó con la norma sísmica de 1982, que fue modificada en 1998 y revisada en 2001. Sin embargo, Garcés explicó que lo referente al concreto armado no sufrió grandes modificaciones, como para afirmar que la torre no sea segura.
En la actividad, organizada por la Oficina Presidencial de Planes y Proyectos Especiales, participaron dos de los creadores del edificio: Enrique Gómez, quien diseñó el complejo, y René Brillembourg, gerente general del proyecto.
En un video proyectado por la Opppe, Gómez se inclinó por la posibilidad de habilitar el edificio y dijo que demolerlo podría resultar “costosísimo”. Sugirió colocar en las fachadas este y oeste de la torre una protección solar y hacer de la estructura la sede de todos los bancos del Estado o de Petróleos de Venezuela.
Brillembourg insistió en que sería un gran error demolerla y apostó por su rehabilitación. Ambos coincidieron en que se trata de una estructura muy bien construida, hecha con los mejores materiales y especialistas de la época.
Centro económico. El arquitecto Newton Rauseo indicó que la torre hay que verla en función de la ciudad y de su contexto inmediato, por lo que propuso que el Sambil pudiese ser un centro social, en el que se desarrollen actividades culturales, artísticas, salas de lectura y biblioteca. “Dejaría el comercio, pero el necesario, no el superficial”, agregó. Newton planteó la posibilidad de eliminar el elevado de San Bernardino y rescatar la ciudad para los peatones. Sobre el uso específico de Confinanzas dijo: “El Estado tiene una función económica muy importante y allí podría desempeñarla con sedes del Banco del Sur, organizaciones de Petrocaribe y el ALBA”.
Nelson Rodríguez, viceministro de Hábitat y Vivienda, desarrolló una propuesta en una línea similar que llamó Complejo Zamora Vive, que consiste en eliminar el elevado de San Bernardino y hacer un bulevar desde el Mercado de Guaicaipuro hasta el Sambil, enterrando la circulación de vehículos, y transformando el centro comercial en un gran centro de convenciones. Rodríguez dijo que la torre más baja del complejo podría convertirse en un hotel para el poder popular. En cuanto a la estructura de 45 pisos señaló que en la base puede haber un centro cívico, en los niveles intermedios el gran centro económico del sur y en los pisos más altos un área de hospedaje para los presidentes que visiten el país.
El arquitecto Juan Vicente Pantin destacó que, con excepción de Pdvsa, no hay en Venezuela una institución con una fuerza de trabajo que logre ocupar los 121.000 metros cuadrados del edificio. “Hay que generar un modelo de gestión urbana que garantice que la estructura pueda sobrevivir en el tiempo”, aseveró. Para lograrlo, Pantin sugirió implementar usos mixtos que incluyan actividades económicas productivas.
¿Inversión necesaria? Para Garcés habría que preguntarse si no constituye un error desperdiciar la inversión social en algo tan opulento como la torre, considerando que el dinero que ameritaría podría ser utilizado en la construcción de nuevas viviendas.
Ernesto Villegas, ministro para la Transformación de la Gran Caracas, subrayó que aún no se ha tomado una decisión definitiva sobre el edificio. “Hay que escuchar todas las ideas sin prejuicios”, dijo. La Opppe habilitó el correo electrónico propuestastorreconfinanzas@gmail.com para que los interesados continúen enviando sus impresiones sobre el futuro de la tercera torre más alta de Venezuela.
Múltiples oportunidades
En el primer día de discusiones, el ministro Ernesto Villegas aseguró que había sido una “travesura” poner en el tapete la posibilidad de la demolición.
“Es importante para el debate. Tenemos que tumbar el mito de que lo que es así, tiene que ser siempre así. Si el estudio técnico indica que no es conveniente demoler y el estudio económico dice que es mejor habilitar, eso se hará”. Agregó que de esta manera se pueden evaluar las múltiples posibilidades que ofrece la estructura.
Expertos
Juan Pedro Posani
Director del Museo de Arquitectura
“La torre tiene un valor simbólico extraordinario, además de su valor político; por eso se le debería devolver la función de vivienda. Podrían arreglarlo para los mismos habitantes actuales porque ellos se han ganado el derecho de estar ahí”
Gladys Maggi
Profesora de Arquitectura en la UCV
“La decisión que se tome no puede considerar la torre como algo aislado. Debe haber una visión integral de la zona para generar espacios públicos adecuados. Hay suficientes metros cuadrados para hacer muchos desarrollos”.
Fernando Castro
Vicepresidente del Consejo Venezolano de Urbanismo
“Es un acierto abordar el tema del hacinamiento en el que vivían estas personas. El reto es que cualquier intervención aumente la calidad de vida. Cualquier decisión que se tome tiene que cumplir el objetivo de generar empleo”.
Fuente: El Nacional