Cómo afecta a los venezolanos la suspensión de vuelos de Alitalia
Puede que todos los caminos conduzcan a Roma. Pero a partir del próximo 2 de junio aquel que pasa por Venezuela ya no será transitado por Alitalia. La aerolínea italiana confirmó el jueves pasado la suspensión «temporal» de sus vuelos hacia y desde el país sudamericano, los que en algún momento llegaron a tener una frecuencia diaria. Y además de causar problemas a aquellos que ya habían comprado sus pasajes, el anuncio también preocupa a muchos otros venezolanos.
Parte del problema es que la decisión reducirá de forma significativa las conexiones con el extranjero, en un país en el que conseguir un boleto aéreo se ha vuelto cada vez más complicado.
Según cálculos de la Asociación de Líneas Aéreas de Venezuela (ALAV), Alitalia es responsable por aproximadamente el 22% del transporte entre Venezuela y Europa; es decir, de uno de cada cinco pasajeros interesados en «cruzar el charco».
Pero el anuncio también da mayor credibilidad a las versiones que afirman que son varias las aerolíneas que están pensando en dar el mismo paso, pues las dificultades para repatriar los dólares generados por la venta de boletos en el mercado local en bolívares -que según Alitalia dejaron de hacer rentable su ruta Roma-Caracas- no afectan únicamente a la aerolínea italiana.
“Eso fue la crónica de una muerte anunciada”, indicó a BBC Mundo el presidente ejecutivo de la ALAV, Humberto Figuera.
“Y yo creo que lamentablemente la tendencia es que las líneas aéreas (que vuelan a Venezuela) vayan suspendiendo o por lo menos reduciendo sus itinerarios, reduciendo sus capacidades”, agregó. Antes de mayo, Alitalia volaba cinco veces por semana desde y hacia Venezuela.
Control de divisas
El nudo del problema está en el estricto sistema de control de cambio de divisas que opera en Venezuela. Las aerolíneas están obligadas a vender sus pasajes en moneda local, pero el gobierno no ha permitido la repatriación de los dólares de sus ganancias.
Según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), eso ha generado una deuda de aproximadamente US$ 4.000 millones, pero los esfuerzos por llegar a un arreglo hasta el momento no han producido resultados.