Volcán en El Salvador mantiene expulsión de gases
SAN SALVADOR (AFP) – El volcán Chaparrastique, ubicado en el este de El Salvador, mantenía este martes la expulsión de gases, mientras unas 1.300 personas permanecían en los albergues, dos días después de que una erupción de cenizas puso en alerta al país, según las autoridades oficiales.
«La actividad reciente se caracteriza por una pluma de gases con un leve contenido de ceniza», consignó en un informe el Ministerio de Medio Ambiente.
El coloso, de 2.130 metros de altura y ubicado 140 km al este de San Salvador, en el departamento de San Miguel, quedó tras la erupción de ceniza con el conducto central del cráter más abierto «y los gases pueden salir con más facilidad», agregó.
«En vista de lo anterior, se considera que se mantiene una situación de riesgo para la población que transita o habita en los alrededores del volcán (…) y no se descartan episodios eruptivos a través del cráter central o sus flancos», advirtió el Ministerio de Medio Ambiente, que mantiene la alerta en el país.
El vulcanólogo Francisco Barahona declaró que el domingo una estación de monitoreo determinó que la exhalación de dióxido de azufre como de carbono por el cráter fue de entre 1.000 y 1.400 toneladas y alcanzó una altura de mas de 5 kilómetros.
La expulsión de vapor y gases no ha permitido a los geólogos y vulcanólogos llegar hasta las cercanías del cráter.
El presidente Mauricio Funes, que el lunes realizó un recorrido por la zona para supervisar el trabajo de Protección Civil y expresar solidaridad con los afectados, dijo que los estudios descartan una erupción de lava y rocas.
Según el mandatario, en los albergues habilitados en los departamentos de Usulután y San Miguel se encuentran 1.324 personas evacuadas, luego que unas 900 decidieron regresar para recibir el año nuevo en sus viviendas en las estribaciones del volcán, a pesar del riesgo que prevalece.
Funes destacó que el gobierno «está mejor preparado que antes» para enfrentar los fenómenos naturales y dijo «rechazar enfáticamente» algunas críticas de la prensa y «detractores políticos» de que el sistema de Protección Civil actuó en forma tardía en virtud de que no hubo una alerta previa, pese a que el volcán tuvo actividad sísmica desde el pasado 13 de diciembre.
En la ciudad de Chinameca, en las cercanías del volcán, el alcalde Saúl Rivas informó a la Radio Nacional de El Salvador que de 360 personas que tenía en un albergue 215 «decidieron» regresar a sus viviendas luego de firmar un acta donde «asumen los riesgos».
Técnicos del Ministerio de Agricultura y Ganadería y productores de café luego de realizar una evaluación preliminar de los cafetales estimaron que la mayor parte de la cosecha ya había sido recolectada por lo que los daños serán menores.
El volcán tuvo su última gran erupción en 1976. De acuerdo con los expertos, registra al menos 20 erupciones en los últimos 300 años.
