Tormenta Raymond amenaza oeste mexicano
ACAPULCO, (AFP) – La tormenta tropical Raymond, que amenaza con cobrar fuerza de huracán, tiene en alerta a los estados costeros del oeste de México, que aún no se han recuperado de la destrucción que dejaron las inusuales tormentas de septiembre, informaron este domingo fuentes oficiales.
«Tenemos una tormenta tropical con posibilidades muy claras de convertirse en huracán «, dijo en conferencia de prensa el director general de la Comisión Nacional del Agua, David Korenfeld, quien precisó que esa posibilidad asciende a 80%.
«Las próximas 72 horas en el Pacífico mexicano serán de lluvias muy fuertes, lluvias torrenciales (de 150 mm o más)», añadió el funcionario, quien subrayó «la saturación del suelo en una zona que ha recibido fenómenos hidrometeorológicos con tanta reiteración, como fue Ingrid y Manuel».
Estos dos fenómenos, que llegaron a alcanzar fuerza de huracán categoría 1, embistieron a México a mediados de septiembre por costas opuestas, dejando a su paso un saldo oficial de 157 muertos y 1,7 millones de damnificados.
A las 18H30 GMT, Raymond se intensificaba «acercándose a los estados del Pacífico central y sur mexicano», indicó el Servicio Meteorológico Nacional, que precisó que la tormenta se encontraba 290 km al suroeste del turístico puerto de Acapulco, en Guerrero, y a 320 km al sur-sureste de Lázaro Cárdenas, en el vecino Michoacán.
Guerrero fue el estado más afectado por Manuel, con 101 muertos. En la zona montañosa, un inmenso alud de tierra y piedras incomunicó y sepultó parcialmente una comunidad, dejando decenas de desaparecidos; mientras que en el puerto de Acapulco miles de turistas quedaron varados ante el cierre del aeropuerto y carreteras.
Impredecible Raymond
Raymond, que provocará precipitaciones en Chiapas, Oaxaca, Guerrero (sur), Michoacán, Jalisco y Colima (oeste), estará interactuando con un frente frío que «arrojará grandes cantidades de agua» en el norte y este del país, explicó Korenfeld.
Según el experto, si el frente frío del norte baja lo suficientemente rápido, podría desviar a la tormenta y cambiar su trayectoria de regreso al océano. «Por eso Raymond tiene posibilidades de entrar a territorio nacional o de abrirse».
Así, en Michoacán se mantienen «monitoreos permanentes en zonas altamente vulnerables», dijo a la AFP una fuente del gobierno estatal.
Por su parte, en Guerrero se decretó la alerta en el centro y sur del estado, con una vigilancia estrecha de cuatro presas cuya capacidad estaba al 100% este domingo y con el cierre a la navegación para embarcaciones menores, pues se espera que el oleaje alcance hasta 3 metros de altura.
Además, se evacuaron unas 150 comunidades con riesgo de deslaves e inundaciones y se reforzó la vigilancia en carreteras, mientras Raymond avanzaba hacia tierra a 9 km/h con vientos sostenidos de 85 km/h y rachas de hasta 100 km/h.
Sólo en Guerrero, unas 5.000 viviendas deberán ser reubicadas y más de 5.000 personas continúan en albergues tras las inusuales tormentas de septiembre.
En aquella ocasión, los habitantes de Acapulco debieron ser rescatados en helicóptero de los techos de sus casas ante las crecientes inundaciones, que obstruyeron el servicio de agua potable de todo el puerto.
En lo que va de 2013, México ha tenido «ocho impactos de fenómenos hidrometeorológicos (sin contar depresiones tropicales), cuatro por cada lado, y estamos a punto de empatar el récord de nueve, que fue en 2010», comentó Korenfeld, al subrayar que México es un país muy vulnerable ante el cambio climático.