7 años de cárcel a Menem

BUENOS AIRES.— El ex presidente argentino Carlos Menem se convirtió ayer en el primer mandatario democrático en ser condenado a siete años de prisión efectiva por ser encontrado culpable del tráfico de armas a Croacia y Ecuador, durante su gobierno (1989-1999).

Menem, actualmente senador, podrá cumplir la reclusión en su domicilio a causa de su edad, 82 años. Junto al ex presidente fue condenado a cinco años el ex ministro de Defensa Óscar Camilión, ambos encontrados culpables por el tribunal oral número 3 como coautores de contrabando agravado, por el que se pedirá su desafuero como legislador.

Menem no acudió a escuchar la sentencia alegando “problemas de presión y diabetes”. Aunque la pena es de cumplimiento efectivo, lo que significa que no puede mediar el arresto domiciliario, la ley argentina deja a arbitrio del juez conceder este beneficio a los mayores de 70 años y los enfermos graves.

El contrabando de armas a Ecuador y Croacia fue uno de los tantos escándalos que caracterizaron el gobierno de Menem; por esa causa, que comenzó a ser investigada en 1995, ya había purgado dos meses de prisión en 2001. Pero en el año 2011 la justicia lo liberó de culpa y cargo, hasta que la Cámara Federal revisó el fallo y ordenó que el expediente regresara al tribunal oral que ayer lo terminó condenando.

Ahora Menem, a través de su defensa, apelará el fallo ante la Corte Suprema de Justicia, lo que llevará varios meses más de trámites judiciales, por lo que se descarta que este año el cuestionado ex mandatario pueda comenzar a cumplir la pena.

Solitario

Afectado en su salud, sumido en el ostracismo y sin recibir casi visitas, Menem pasa los días en su casa del barrio de Belgrano donde vive junto a su ex mujer Zulema Yoma y su hija, Zulemita. Tampoco concurre a las sesiones del Congreso y la mayoría de sus ex funcionarios lo abandonaron.

La venta ilegal de armas a Ecuador, cuando Argentina era uno de los garantes de los acuerdos de paz entre Quito y Lima en plena guerra del Cóndor, como a Croacia, derivaron en otros delitos conexos.

La explosión de la planta de Fabricaciones Militares en la ciudad Cordobesa de Río Tercero, Córdoba, que provocó la muerte de decenas de personas para ocultar pruebas fue uno de los oprobios más recordados de su gobierno.

Esa causa aún espera una resolución de la justicia, como otras tantas derivadas de una espiral de corrupción que, con el sello del menemismo, logró prolongarse en el tiempo y en otros gobiernos sucesivos.

Información El Universal