Niño que llora de hambre ante un balón, fenómeno de internet del Mundial de Brasil
SAO PAULO, (AFP) – Un niño negro llora de hambre ante un plato de comida donde sólo hay un balón de fútbol: la imagen de ese grafiti se convirtió en un fenómeno de internet a las puertas de la Copa del Mundo de Brasil.
La creación del artista Paulo Ito se regó como pólvora por las redes sociales y se convirtió en un viral. Él mismo la publicó en su página de Facebook y desde ahí fue compartida miles de veces, cosechando cientos y cientos de ‘likes’.
«Es una imagen que ya permeaba nuestro inconsciente colectivo», declaró Ito en una entrevista con la AFP a través de Facebook.
«Para mí, la Copa es una buena oportunidad de exponer al mundo los problemas de Brasil y, quien sabe, provocar un mínimo de vergüenza en la cara de nuestra clase política, tan apática», comentó.
El grafiti está pintado en el muro de una escuela en el barrio de Pompeia en la zona oeste de Sao Paulo y su autor, que lleva 14 años plasmando imágenes y colores en las calles, reconoce que no esperaba la repercusión que ha tenido.
En el grafiti el niño aparece llorando en un cuarto de madera, con el torso desnudo y sentado ante una mesa casi vacía y con la pintura descascarada. Hay un vaso y, sobre el plato, un balón.
«Los ojos expresan tristeza y rabia», dice Ito.
La imagen fue pintada a inicios de este mes y publicaciones como The Huffington Post o la revista estadounidense Slate, entre muchas otras, ayudaron a difundirla.
«Yo no quiero definir esa imagen, quiero que haga sentido a partir de la lectura de los otros. Siento que muchos la encaran como una imagen triste, aunque la base de ella sea el humor», planteó Ito, de 36 años.
«Lo que yo quería era crear material que llamara a la reflexión, que tenga contenido. No tuve la intención de atacar a nadie específicamente, pero sí de exponer una situación», añadió.
Con un costo estimado de 11.000 millones de dólares para las arcas públicas brasileñas, el Mundial ha estado en el centro de masivas protestas callejeras que reclaman por esos gastos y exigen mejoras sociales o mejores servicios públicos.
El año pasado las protestas fueron multitudinarias, con más de un millón de brasileños en la calle. Este año han perdido capacidad de convocatoria, aunque en ocasiones han sido más radicales y violentas.
Con más de 200 millones de habitantes y la mayor economía de América Latina, Brasil es un país de profundos contrastes.
Y a medida que se acerca la Copa del Mundo, que va del 12 de junio al 13 de julio, un clima de protestas sociales y huelgas agita el país, con movilizaciones de policías, profesores y conductores de autobuses, entre otros, que aprovechan la enorme notoriedad de Brasil en estos días.
Sao Paulo es la ciudad más rica del país y acogerá el partido inaugural del Mundial el 12 de junio. Camino al estadio Arena Corinthians, en la zona este de la ciudad, otro grafiti (de 4 km) está siendo preparado como homenaje a la hinchada y a la ‘Seleçao’.