Sony cancela parodia norcoreana mientras crecen sospechas sobre Pyongyang por ciberataque
Los Ángeles, Estados Unidos | AFP. Sony Pictures claudicó este miércoles y no estrenará en Navidad «The Interview», una parodia sobre Kim Jong-un, mientras crecen las sospechas de que Corea del Norte ordenó el ciberataque de noviembre contra los estudios de Hollywood.
Medios estadounidenses informaron que las autoridades que investigan el caso tienen la certeza de que Pyongyang está detrás de la filtración masiva de información confidencial de la compañía de cine.
Esta línea de investigación «parece correcta», señaló a la AFP una fuente de Sony Pictures que pidió el anonimato.
El gobierno de Barack Obama «se está preparando para culpar a Corea del Norte», afirmó de su lado la cadena CNN. La acusación formal podría hacerse el mismo jueves.
El gobierno de Corea del Norte ha negado cualquier vinculación con el ciberataque, que según algunos expertos pudo haber sido ejecutado por empleados descontentos o por simpatizantes de Kim Jong-un ofendidos por la película.
Entretanto, Sony anunció la cancelación del estreno la película («Una loca entrevista» en Latinoamérica), después de que las principales cadenas de cines rechazaran proyectarla.
De esta forma tuvieron efecto las amenazas del autodenominado grupo GOP o Guardianes de la Paz (Guardians of Peace), que el martes evocó los ataques del 11 de septiembre de 2001 en una ominosa advertencia a los aficionados que fueran a ver la película.
La película de la discordia trata sobre un complot orquestado por la CIA para matar a Kim Jong-un, aprovechando que dos periodistas estadounidenses interpretados por James Franco y Seth Rogen logran un permiso para entrevistar al líder norcoreano.
«Recuerden (los ataques de) el 11 de septiembre de 2001», advirtieron los piratas informáticos. «Les recomendamos que se mantengan alejados de los cines. (Si su casa está cerca de uno de ellos, es mejor que no esté)».
«Respetamos y entendemos la decisión de nuestros socios y, evidentemente, compartimos totalmente su primordial interés de garantizar la seguridad de sus empleados y de los espectadores», explicó Sony en un comunicado.
Obama dijo que los estadounidenses no deben sentirse intimidados por las amenazas del GOP. «Mi recomendación es que la gente vaya al cine», declaró en una entrevista con el canal ABC.
La portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, había dicho previamente que «no hay información creíble para respaldar» esas amenazas.
Sony también reconoció «no tener planes para estrenar en el futuro» esta comedia.
Las celebridades responden
Hasta ahora solo los Guardianes de la Paz han reivindicado el ciberataque que sufrió Sony el 24 de noviembre y que ha dejado al descubierto cientos de correos electrónicos, guiones aún en producción y otras comunicaciones internas que incluyen salarios, registros de salud e información privada en general.
Los estudios calificaron este miércoles el ataque informático de «asalto criminal sin precedentes (…) que buscaba destruir el espíritu y la moral» de los trabajadores de la compañía.
«Todo esto aparentemente para impedir el estreno de una película que no les ha gustado», afirmó Sony.
La compañía dijo estar «profundamente triste» de suspender la distribución de la cinta, pero recalcó que es una férrea defensora «del derecho a la libertad de expresión de los directores».
Decenas de celebridades estadounidenses reaccionaron en las redes sociales a la noticia sobre la cancelación de «The Interview», como Steve Carell, quien lamentó vivir «un mal día para la libertad de expresión» o Mia Farrow, quien aseguró que «ganaron los chicos malos».
En clave de humor, el director Michael Moore pidió a los piratas informáticos «menos comedias románticas, menos películas de (el director) Michael Bay y menos (films de) Transformers».
La política y los negocios tampoco quedaron al margen de esta situación. El ex candidato presidencial republicano Mitt Romney pidió a Sony «no ceder, (sino) luchar», así como estrenar en línea de forma gratis «The Interview».
El empresario Donald Trump también se quejó de la decisión de Sony, que, afirma, perjudica la libertad de expresión.