Primer ministro griego proclama fin de la austeridad
El primer ministro griego Alexis Tsipras encaminó el domingo a su gobierno de izquierda hacia un enfrentamiento con los acreedores de la nación al proclamar el fin de la era de austeridad y «cinco años de atrocidad por el rescate financiero».
Ante los legisladores, Tsipras presentó su declaración de intenciones de política de gobierno entre las que se encuentran, como lo había adelantado, todas las promesas realizadas por su partido radical de izquierda Syriza en su manifiesto previo a las elecciones del mes pasado.
El gobierno «ha tomado la decisión irrevocable de apegarse por completo a sus compromisos preelectorales», dijo Tsipras, indicando que no transigiría en las posturas de su partido.
Al exigir «un trato a corto plazo» que daría a Grecia y sus acreedores más tiempo para negociar un nuevo acuerdo de deuda mucho más favorable a su país para junio, Tsipras pareció apegarse a un enfoque al que no prestaron atención sus socios de la Unión Europea en una serie de reuniones que sostuvieron la semana pasada Tsipras y su ministro de Finanzas con funcionarios europeos.
«Si nuestros socios (de la UE) están dispuestos, podemos acordarlo mañana temprano», enfatizó Tsipras.
Pero eso significaría que el resto de la Unión Europea abandone sus políticas manifiestas y ceda ante la presión del partido Syriza.
«El acuerdo de rescate ha sido abolido por mandato popular», dijo Tsipras en referencia a los dos acuerdos que han mantenido solvente a Grecia —que tiene enormes problemas de deuda— y le han proporcionado una cifra históricamente sin precedencia de 240.000 millones de euros (271.400 millones de dólares) en asistencia.
Esto vino acompañado de políticas de austeridad que contrajeron un trimestre la economía griega y dieron como resultado una tasa récord de desempleo, con más de la cuarta parte de la fuerza laboral desempleada.
Habiendo llegado al poder como resultado de una repercusión negativa contra esas medidas, Tsipras dirigió su discurso por completo hacia la audiencia nacional, insistiendo en que es la Unión Europea la que debe regresar a sus «principios originarios de solidaridad, cohesión social, crecimiento y democracia».
«Declaramos categóricamente: no negociaremos nuestra historia. No negociaremos el orgullo y dignidad de este pueblo», dijo un emotivo Tsipras al concluir su discurso.
El actual acuerdo de rescate financiero termina al final de febrero, pero Tsipras dijo que el gobierno «no está facultado para solicitar una extensión», mientras que estalló contra el gobierno previo por rechazar a propósito una propuesta de la Unión Europea de extender el acuerdo a junio para que un gobierno encabezado por el partido Syriza enfrentara fechas límite ajustadas.
«Ellos quemaron los cultivos e hicieron explotar los puentes», agregó Tsipras respecto al gobierno anterior formado por una coalición conservadora-socialista.