Navieras de EEUU buscan zarpar con pasajeros hacia Cuba
Miami, Estados Unidos.- La empresa que dirige Joseph Hinson pidió una licencia al gobierno estadounidense en 2010 para una ruta de ferry a Cuba desde Florida y nunca recibió respuesta. Ahora tras el acercamiento entre ambos países lo vuelve a intentar con optimismo.
United Americas Shipping Services integra un puñado de compañías navieras en Florida (sureste de EEUU) que desean instaurar rutas marítimas aprovechando el enorme interés en viajar a Cuba que se ha generado por el anuncio en diciembre de que Washington y La Habana dejaban atrás medio siglo de enemistad y buscaban restablecer relaciones, informó AFP.
Las empresas saben que las nuevas normativas del gobierno de Barack Obama que desde enero facilitaron los viajes de estadounidenses a la isla no incluyeron el traslado de pasajeros en barco a Cuba, por lo que admiten que el camino burocrático es largo e incierto.
Actualmente los viajes de Estados Unidos a la isla los realizan exclusivamente compañías de vuelos fletados. Los servicios de transbordadores entre Florida y Cuba, que fueron populares hasta que fueron interrumpidos en la década de 1950, no han recibido autorización.
«Visualizamos operar un barco que transporte mil pasajeros» unas tres o cuatro veces por semana, indicó en Miami a la AFP un optimista Hinson, presidente de United Americas Shipping Services.
«La meta de CubaKat es ofrecer nuestro servicio de ferry, de los Cayos de Florida a puertos en Cuba, en el 2015. Actualmente, estamos trabajando con funcionarios de ambos países para hacer de esta aventura una realidad», señala en su página web otra empresa.
CubaKat, que quiere comenzar a operar en diciembre de 2015 un servicio de catamaranes de alta velocidad para hacer el trayecto en menos de tres horas, inició los trámites en 2011, pero ahora cree «que el momento de empezar a operar nuestro servicio se acerca rápidamente».
Otra empresa, Key West Express, ha manifestado su interés de ampliar su ruta actual entre Ft Myers -costa occidental de Florida en el Golfo de México- y los Cayos, hasta la isla.
– Maratón burocrático –
En ausencia de respuesta a una primera petición de licencia realizada en 2010, la firma de Hinson, parte de un grupo empresarial de carga marítima y servicio de transbordadores de México a California y de Puerto Rico a República Dominicana, volvió a introducir la petición esta semana.
«Estamos escuchando de varias fuentes que esta vez al menos va a ser seriamente considerada y de que podría haber apoyo a un servicio de ferry», dijo Hinson. Su empresa busca ofrecer un servicio nocturno para conectar en diez horas Miami con Cuba, en confortables barcos que ofrezcan servicios de restaurantes y casino.
Pero no solo se necesita el sello de la oficina que controla los activos extranjeros en el tesoro, OFAC, sino también de otras agencias estadounidenses.
Y no menos importante, también Cuba tendrá que dar su visto bueno.
«Un servicio de ferry solo puede funcionar con una licencia específica de OFAC, en coordinación con el Departamento de Estado y luego de la aprobación del Departamento de Comercio y CBP (guardia de fronteras», explica a la AFP una portavoz del Tesoro, Hagar Chemali.
El Tesoro no comenta sobre las posibilidades de que una solicitud sea aprobada.
Menos restricciones, más servicios
Las empresas saben que por ahora solo podrán transportar personas que entren dentro de las doce categorías establecidas para los viajeros estadounidenses, entre ellas visitas familiares o con fines académicos, culturales, deportivos o religiosos, mientras el turismo siga prohibido.
Pero creen que la posibilidad de ofrecer servicios más económicos que los vuelos charter los hará competitivos. También aprovecharán la demanda de viajes a Cuba que existe en Florida, donde vive gran parte de los dos millones de cubanos residentes en Estados Unidos.
«A medida que las relaciones mejoren y las restricciones se suavicen, buscaríamos poder ofrecer otro tipo de servicios», como el transporte de automóviles particulares o de camiones de carga, dijo Hinson.
Pese a que saben que el camino es largo, las empresas preparan todos los detalles para operar rápidamente si reciben luz verde.
«Diría que si alguien nos da la aprobación hoy, podríamos estar listos en tres meses», prometió Hinson.