Kirchneristas apoyan al gobierno argentino en batalla con «fondos buitres»
BUENOS AIRES, (AFP) – Unas 12.000 partidarios de la presidenta argentina Cristina Kirchner se manifestaron este martes en un estadio en Buenos Aires bajo la consigna «Patria o Buitres», en apoyo a la batalla legal del gobierno en Estados Unidos contra fondos especulativos que reclaman el pago de una deuda.
«Patria sí, colonia no», fue el estribillo más coreado por la multitud en el escenario del Luna Park, templo del boxeo y de los shows populares, en las cercanías de la casa de gobierno en la capital.
Un juez de Nueva York, Thomas Griesa, condenó al país a pagarle el 100% en efectivo de una deuda en mora de 1.330 millones de dólares a los fondos especulativos NML y otros, pero al no ser cumplida la orden bloqueó en un banco fiduciario, en represalia, un pago de 539 millones de dólares de la deuda reestructurada.
El embargo de hecho que pesa sobre ese dinero provocó un «default selectivo (parcial)» de la deuda que el gobierno había logrado refinanciar entre 2005 y 2010 con apoyo del 93% de los acreedores, salvo un 7% que rechazó la operación y entabló demandas en los tribunales.
«Vine aquí para defender nuestra soberanía nacional, porque la estrategia de los fondos buitres es en contra de los intereses de nuestros países y de todos los países en desarrollo», dijo a la AFP Eric Lagorio, de 24 años, miembro de un movimiento de jóvenes militantes peronistas de centroizquierda, envuelto en una bandera con los colores de Argentina.
Argentina intentó llevar a Estados Unidos a dirimir la batalla legal ante la Corte de Justicia Internacional de La Haya, pero Washington rechazó esa jurisdicción al afirmar que es un asunto exclusivamente judicial en Nueva York.
«La mayor parte de la deuda de Argentina se formó durante la dictadura (1976-1983), cuando la gente no podía decir nada», afirmó Gladys Negrelle, una politóloga de 58 años, en medio del ensordecedor sonido de los cánticos y redoblar de tambores.
La deuda con los fondos se originó en la década de los años 90, cuando el país tomaba préstamos para financiar su déficit fiscal.
El conflicto en la justicia estadounidense se encuentra estancado tras fracasar negociaciones directas e incluso otras encaradas por empresas privadas para comprar la deuda de los fondos.
«Usted tiene que pagar la deuda, pero sólo lo que fue prestado y nada más», dijo Gonzalo Ruiz, un estudiante de nivel medio de 16 años, que junto con amigos dio su apoyo a la política del gobierno.