Huracán Simon se debilita a categoría uno en el Pacífico mexicano
LA PAZ, (AFP) – El huracán Simon, que llegó a alcanzar la categoría cuatro sobre el Pacífico, se debilitó este domingo a categoría uno, mientras las autoridades de la península de Baja California (noroeste de México) esperan que toque tierra en los próximos días como depresión.
Hacia las 09:15 pm GMT, el meteoro se encontraba a 780 km al oeste de Cabo San Lucas, una turística localidad en el extremo sur de Baja California, donde seis personas murieron y cientos quedaron sin hogar tras el paso de Odile hace tres semanas.
Simon, que alcanzó fuerza de huracán categoría cuatro -de cinco de la escala Saffir-Simpson- entre el viernes y el sábado, se desplazaba hacia el nor-noroeste a 15 km/h con vientos sostenidos de 120 km/h, ya como «huracán categoría I», indicó el último reporte del Servicio Meteorológico Nacional de México (SMN).
El organismo prevé lluvias intensas en la zona, mientras que las autoridades locales cerraron los puertos a todo tipo de navegación ante los fuertes oleajes que alcanzaron los cinco metros de altura.
El sábado, el Centro Nacional de Huracanes estadounidense había estimado que, tras alcanzar la categoría cuatro, Simon empezaría a debilitarse gradualmente y que impactaría hacia el próximo jueves en la zona central de la península, pero ya como una más débil depresión tropical.
Así, las autoridades locales se reunieron para empezar a planear posibles desalojos, apertura de albergues y protocolos de seguridad.
Este domingo, mil soldados y policías federales fueron desplegados en los municipios de Loreto y Mulegé para reforzar los bordos de contención costeros y llevar a la zona una tonelada de víveres.
«Hasta el momento están abiertos los aeropuertos de La Paz y Los Cabos. Estamos valorando si cerramos el aeropuerto internacional de Loreto», puntualizó el delegado de la secretaría de Comunicaciones y Transportes, Eleazar Gutiérrez.
El sábado se envió, por primera vez en territorio mexicano, un avión cazahuracanes de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica estadounidense (NOAA, en inglés) para monitorear a Simon.
La región sur de Baja California intenta recuperarse de los destrozos provocados por Odile, que golpeó tierra el 14 de septiembre con la fuerza de huracán categoría tres, dejando un saldo de seis muertos y millonarios daños materiales, incluso en los lujosos hoteles de la zona turística.
Tras el paso de Odile, la población estuvo varios días sin suministro de electricidad, agua potable y señal telefónica.