FARC dice que negocia con Santos porque admitió causas conflicto armado en Colombia
LA HABANA, (AFP) – La guerrilla comunista de las FARC dijo este lunes que negocian la paz con el presidente Juan Manuel Santos por su reconocimiento de las causas del conflicto armado en Colombia y no estimarlo «una amenaza terrorista» como su antecesor, Álvaro Uribe.
«Hay que reconocerle a Santos que a diferencia de Uribe aceptó que en Colombia existía un conflicto armado y no una amenaza terrorista», dijo la FARC en su sitio en internet, en vísperas de iniciar en La Habana el ciclo 29 de las pláticas de paz.
Santos también asumió que «ese conflicto tenía unas viejas causas que había que solucionar. Haber reconocido eso, ya era algo muy importante para nosotros y para el pueblo colombiano. Otra cosa que él crea que las soluciones son unos paños de agua tibia», señaló las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
«Ese precisamente (las viejas causas) es el gran tema de discusión en la Mesa: las verdaderas soluciones para nuestro pueblo. En eso estamos», indicó.
No obstante, aclaró, se trata de un Gobierno «oligárquico, reaccionario, neoliberal y militarista», «completamente entregado a los intereses del imperialismo norteamericano (…), que aspira a que nuestro país en un futuro, desempeñe en nuestro continente el papel que hoy juega Israel en el Medio Oriente».
Sostuvo que el error de Santos es partir de la premisa «de que somos una guerrilla vencida, desmoralizada y a punto de rendirse».
«Por eso nos propuso dialogar, con la secreta ilusión de que nosotros aceptaríamos enseguida, para rendirnos ante él y salvar nuestras vidas», indicó.
«Pero se equivocó completamente», sostienen las FARC.
«Nunca hemos estado tan lejos de una entrega o rendición como ahora. Así que si aceptamos sentarnos a una mesa de diálogos con el gobierno, lo hacemos con nuestra propia idea: encontrar una solución distinta, de carácter civilizado y pacífico, a los graves problemas políticos, económicos y sociales que padece el pueblo colombiano».
Desde noviembre de 2012, las partes han consensuado tres de los seis puntos de la agenda: reforma rural (mayo de 2013), participación política (noviembre de 2013) y drogas ilícitas (mayo de 2014).
Además de la atención a las víctimas, actualmente en discusión, quedan pendientes los temas del abandono de las armas por las FARC y el mecanismo para refrendar un eventual acuerdo de paz.