Ex jefe de seguridad chino detenido y expulsado del Partido Comunista
La lucha contra la corrupción en China, una de las prioridades del presidente chino, Xi Jinping, superó una nueva etapa con la detención y la expulsión del Partido Comunista Chino (PCC) del ex ministro de Seguridad Pública, Zhou Yongkang, la desgracia política más importante en 35 años.
Según la agencia estatal de noticias Xinhua, Zhou, quien se retiró del poderoso buró político del Partido Comunista en 2012, «filtró secretos del partido y del país» durante su mandato y «aceptó grandes sumas de dinero y propiedades personalmente y a través de su familia».
El anuncio convierte a Zhou, de 72 años, en el responsable de mayor rango del PCC investigado desde el procesamiento en 1980 de la famosa Banda de los Cuatro, que incluía a la viuda del exlíder Mao Zedong.
«Abusó de sus poderes para ayudar a sus allegados, amantes y amigos a obtener grandes beneficios en contratos comerciales, lo que ocasionó grandes pérdidas a los activos del Estado», según Xinhua, que cita un comunicado del buró político.
El lenguaje utilizado por la agencia es inusualmente franco. Zhou «cometió adulterio con numerosas mujeres y utilizó su poder para obtener sexo y dinero», explicó.
«Su comportamiento mancha la reputación del Partido, y perjudica gravemente a la causa del Partido y del pueblo», añadió la agencia estatal.
La decisión de expulsar al ex ministro de Seguridad Pública se acordó el viernes «en una reunión del buró político del comité central del Partido Comunista Chino».
La expulsión de una responsable del PCC abre generalmente la vía a su inculpación, al reconocimiento de su culpabilidad durante un proceso y a su condena a prisión.
Este ex patrón del gigante petrolero chino China National Petroleum Corporation (CNPC), nacido en 1942 en la ciudad industrial de Wuxi, es una figura central de lo que muchos analistas denominan «la facción del petróleo» en el seno del PCC.
Se trata de una red de influyentes responsables políticos, que mantienen vínculos con la lucrativa industria china de crudo.
En 2002, Zhou alcanzó el último círculo de poder al convertirse en uno de los 25 miembros del buró político del Partido Comunista con las funciones de ministro de Seguridad Pública.
Este responsable político también era miembro del comité permanente del buró político del PCC y, en este sentido, uno de los hombres más poderosos del país. Durante su mandato, el presupuesto de los órganos de seguridad chinos sobrepasó el del ministerio de Defensa.
Durante los levantamientos populares en las regiones autónomas del Tíbet en 2008 y de Xinjiang en 2009, feudo de la minoría musulmana de los uigures, el entonces jefe chino de seguridad destacó por el uso de la fuerza para reprimirlos.
El presidente Xi hizo de la lucha contra la corrupción uno de los ejes de su política y aseguró que combatiría tanto contra «las moscas», los pequeños funcionarios corruptos, como contra los «tigres», los altos dirigentes.
Algunos observadores estiman que este cruzada contra la corrupción sirve también al jefe de Estado chino para eliminar a sus adversarios políticos.
Asimismo, a pesar de esta voluntad de lucha, la corrupción empeoró en China, según un informe reciente de la oenegé Transparencia Internacional.