Evacuados y daños materiales por inundaciones en Argentina
Buenos Aires, Argentina | AFP. Un temporal azotó este martes el centro y norte de Argentina donde se registraron evacuados por inundaciones, daños por la caída de árboles, cortes de electricidad y complicaciones en las terminales aéreas, además de varios heridos leves, según las autoridades.
El Servicio Meteorológico Nacional mantiene una alerta que abarca la capital argentina y el centro-norte del país, ante la prevención de tormentas eléctricas con fuertes ráfagas de viento, caída de granizo y violentos chaparrones.
En Córdoba (centro) unas doscientas personas tuvieron que ser evacuadas por la creciente de los ríos, y todavía se esperan nuevas crecidas, alertó Defensa Civil.
La lluvia causó derrumbes en las rutas de montaña, mientras que varias ciudades sufrieron cortes de energía por la caída de postes de energía.
En Buenos Aires la tormenta causó demoras y cancelaciones en el aeropuerto Jorge Newbery, sobre todo por la imposibilidad de recargar combustible en medio del alerta por descargas eléctricas. Varios vuelos debieron ser desviados a otras terminales aéreas.
La tormenta también afectó al funcionamiento de los aeropuertos de Rosario, Córdoba (centro), Bahía Blanca (sur) y Mendoza (oeste).
El temporal fue precedido por dos días de intenso calor (hasta de 40 grados C°) en pleno verano austral.
Pese a todo, el aeropuerto internacional de Ezeiza, 30 km al sur de Buenos Aires, mantenía casi sin alteraciones su esquema de arribos y partidas al igual que los servicios de ferry del puerto de Buenos Aires hacia Uruguay.
Varios barrios de la capital sufrieron anegaciones y caída de árboles que destruyeron vehículos.
Dos personas sufrieron traumatismos por la caída de un poste de tendido eléctrico en el barrio porteño de San Nicolás, reportó la Guardia de Auxilio de la ciudad donde los exclusivos barrios de Palermo, Belgrano y Núñez se cuentan entre los más afectados.
Distintas rutas y accesos a la ciudad quedaron intransitables por el agua.
En Resistencia, capital de la provincia de Chaco (norte) se registraron vientos huracanados que alcanzaron los 120 kilómetros por hora y causaron la voladura de techos, caída de árboles y destrozos, aunque no víctimas, según la policía.
La tormenta afectó el suministro de agua potable y de energía eléctrica, destrozó cristales y mamposterías de edificios públicos y dobló las antenas de dos emisoras de radio local, entre otros daños.