Charlie Hebdo con Mahoma en la portada vuela de los kioscos en Francia
París, Francia | AFP. El nuevo número de Charlie Hebdo con Mahoma en la portada, condenado por autoridades musulmanas en varios países, se agotó este miércoles en pocos minutos en los kioscos franceses, una semana después del atentado que fue reivindicado por Al Qaida en Yemen.
El ataque que dejó 12 muertos, entre ellos los dibujantes más destacados de la revista satírica, fue reivindicado el miércoles por Al Qaida en Yemen, que dijo que la acción tuvo como objetivo «vengar» a Mahoma, que había sido caricaturizado por el semanario.
Los sobrevivientes de la redacción del semanario satírico representaron a Mahoma con una lágrima portando un letrero «Yo soy Charlie» y bajo el título «Todo queda perdonado».
«Charlie Hebdo vive y vivirá» afirmó el presidente francés, François Hollande, luego que muchas personas hicieran cola antes de la salida del sol para hacerse con un ejemplar.
La revista logró un récord de ventas en Francia, donde el editor decidió subir la tirada de este número de tres a cinco millones de ejemplares, mientras que se proyecta que sean enviados al extranjero unas 300.000 copias.
La publicación, que antes vendía 30.000 ejemplares en cada edición y que en diciembre enfrentaba dificultades para pagarle a sus empleados, se difundió en más de 20 países.
«Tenía una cola de entre 60 y 70 personas esperando cuando abrí», dijo una quiosquera en París. «Nunca he visto algo así. Vendí mis 450 ejemplares en 15 minutos».
En un vídeo, uno de los dirigentes de Al Qaida en la Península Arábiga (AQPA), Naser Ben Ali al Anasi, aseguró que el ataque había sido ordenado y financiado por el jefe supremo de la red, el egipcio Ayman al Zawahiri.
«Unos héroes fueron reclutados y actuaron», declaró uno de los dirigentes de Al Qaida en la Península Arábiga (AQPA), Naser Ben Ali al Anasi, refiriéndose a los autores del ataque, los hermanos Cherif y Said Kouachi.
«Insultante»
La portada sobre Mahoma fue reproducida por muchísimos medios de comunicación y sitios en internet en todo el mundo incluyendo en toda América latina, pero sobre todo en Europa, tras la masiva marcha dominical que reunió en París a medio centenar de dirigentes políticos extranjeros.
En cambio, fue soslayada por los grandes medios de los países musulmanes, puesto que el islam prohíbe representar al profeta.
En Turquía, no obstante, el diario opositor Cumhuriyet publicó buena parte del número. Un tribunal turco ordenó el bloqueo de las páginas web que difundan la caricatura.
Irán condenó la publicación a través de su cancillería y la calificó de «insultante» e hiriente «para los sentimientos de los musulmanes».
El muftí de Jerusalén Mohammad Hussein opinó que fue «un insulto que hirió los sentimientos de cerca de 2.000 millones de musulmanes», mientras que la organización organización yihadista Estado Islámico (EI) calificó la publicación de nuevas caricaturas como «extremadamente estúpida».
En 2006, Charlie Hebdo reprodujo las caricaturas de Mahoma cuya publicación en el diario danés JyllandsPosten habían desencadenado violentas manifestaciones.
El Mahoma de Charlie Hebdo también estuvo prácticamente ausente en los grandes medios de Estados Unidos, donde la sátira religiosa es tabú, y en la mayoría de los diarios británicos.
Humorista Dieudonné detenido
«Nuestro Mahoma es mucho más simpático que el que enarbolan quienes dispararon (en el atentado). Es un hombre bondadoso capaz de llorar», se defendieron los sobrevivientes del semanario. «El espíritu de ‘Je suis Charlie'» también es el del «derecho a la blasfemia», resumió su abogado, Richard Malka, rechazando cualquier acusación de islamofobia.
En respuesta a los atentados, el primer ministro Manuel Valls anunció el martes en un discurso aplaudido por toda la clase política, «medidas excepcionales» para detectar mejor a los potenciales yihadistas, con los que considera que el país «está en guerra». Las medidas incluyen el intercambio de información de los pasajeros aéreos en Europa y el aislamiento de los yihadistas en las cárceles.
El Gobierno francés anunció además medidas para responder «con firmeza» a las manifestaciones que considere como una «apología del terrorismo» o al racismo, incluyendo incidentes en las escuelas, que superaron unos 200 casos desde los ataques, de los cuales medio centenar fueron señalados a la policía.
El polémico humorista francés Dieudonné, investigado por «apología del terrorismo» tras los atentados de París, fue detenido el miércoles y será juzgado por este delito.
Dieudonné había declarado en internet «me siento Charlie Coulibaly», refiriéndose a Amedy Coulibaly, asesino de una mujer policía y cuatro judíos, en los dos días posteriores al atentado.