Crisis por desaparecidos en México impacta en relaciones con Uruguay y Chile
La crisis política mexicana causada por las protestas contra la desaparición de 43 estudiantes en el estado de Guerrero ha tenido repercusión internacional tras las críticas del presidente de Uruguay, José Mujica, y por el arresto de un estudiante chileno en la capital mexicana.
El Gobierno mexicano manifestó «su sorpresa y rechazo categórico» ante algunas de las opiniones expresadas por Mujica a la revista a la revista Foreign Affairs Latinoamérica respecto a la situación por la desaparición los estudiantes.
«Es terrible que se caiga en ese tipo de cosas. A uno le da una sensación, visto a la distancia, que se trata de una especie de Estado fallido, que los poderes públicos están perdidos totalmente de control, están carcomidos», señaló Mujica, y añadió que «es muy doloroso lo de México».
En respuesta a los comentarios del mandatario uruguayo, la Secretaría de Relaciones Exteriores de México se comunicó con la Cancillería ese país sudamericano y citó al embajador de ese país, Jorge Alberto Delgado Fernández, para pedir explicaciones sobre el caso.
En este artículo, Mujica afirmó que esa situación en México ha sido posible debido a «una gigantesca corrupción». Y esto se ha establecido, «me da la impresión, visto a la distancia, como una tácita costumbre social».
En su respuesta la Cancillería mexicana afirmó que «actos como los ocurridos en esta región del país, no deben tener cabida ni en México ni en el mundo».
Además reiteró el compromiso del Gobierno mexicano de continuar las investigaciones con claridad, transparencia y responsabilidad, «tal y como lo ha venido haciendo hasta ahora».
También recordó la importancia de sus vínculos históricos de amistad con el pueblo y Gobierno de Uruguay, a quienes nunca les ha faltado la solidaridad del pueblo y Gobierno de México».
El pasado 26 de septiembre policías municipales de Iguala atacaron a tiros a estudiantes de magisterio y dejaron seis muertos y 25 heridos, mientras que otros 43 permanecen desaparecidos ocho semanas después de los hechos.
Según las investigaciones de la fiscalía, los 43 jóvenes fueron capturados por orden del entonces alcalde, José Luis Abarca, y entregados al grupo criminal Guerreros Unidos que los asesinaron e incineraron.
Por otro lado, el arresto del estudiante chileno Lawrence Maxwell Ilabaca, a manos de la policía mexicana ha generado una fuerte reacción de protesta en Chile debido a que según los testimonios fue una detención arbitraria.
Mercedes Rojas, una chilena que estudia un doctorado en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y amiga de Maxwell, explicó a Efe que su compañero no participó en las protestas y que llegó en bicicleta a la periferia de la plaza central, conocida como el Zócalo, para observar de lejos.
Los extranjeros tienen expresamente prohibido involucrarse en actividades políticas internas de México.
«Sin embargo, una estampida de personas que corrían de la policía lo arrolló y fue cuando lo capturaron los policías», dijo Rojas.
Afirmó que Maxwell fue trasladado a las instalaciones de la Subdirección Especializada en la Investigación en Delincuencia Organizada (SEIDO) donde fue obligado a rendir su declaración antes de que concluyera el plazo previsto por la ley y sin haber tenido la posibilidad de contar con un abogado de su elección.
Por este motivo, junto con los otros hombres detenidos fue trasladado a un centro penitenciario del estado de Veracruz el sábado por la mañana, mientras que las mujeres fueron llevadas a una cárcel en Nayarit.
Rojas indicó que en Veracruz los detenidos se encuentran aislados del restos de los demás presos, acusados de diversos delitos y no han sufrido, aunque en general se encuentran bien.
Agregó que ahora esperan dar de alta a un abogado que su familia ha designado para su defensa.
Mientras tanto en Chile, este día unas 80 personas protestaron ante la embajada de México en contra de detención del estudiante chileno y exigieron a las autoridades de su país que realizasen gestiones diplomáticas para lograr la libertad de Maxwell.
«Esta manifestación tiene por objeto hacernos presente en la embajada de México para que nos escuchen y para que divulguen la preocupación que nosotros tenemos, como padres, por estas cosas injustas que le han imputado», afirmó durante la protesta María Eugenia Ilabaca, madre del detenido.
Tras la manifestación, la embajada de México emitió un breve comunicado en el que puntualiza que desde el momento de la detención, «las autoridades consulares chilenas fueron debidamente notificadas por el Ministerio Público Federal».
Añadió que las autoridades mexicanas «brindan todas las facilidades para que el ciudadano de nacionalidad chilena sea asistido por parte su Consulado» y añade que todos los detenidos «gozan de todas las garantías que la ley mexicana otorga a toda persona sujeta a un proceso jurídico»..
Información //www.lavanguardia.com/politica/20141124/54420655077/crisis-por-desaparecidos-en-mexico-impacta-en-relaciones-con-uruguay-y-chile.html#ixzz3Jx4RkKMH