Banco Central de Venezuela subasta 210,2 millones de dólares
CARACAS (AFP) – El Banco Central de Venezuela (BCV) subastó este miércoles 210,2 millones de dólares en la tercera venta de este tipo en 2013, que busca dotar de divisas a empresas que requieren importar en un país con férreo control cambiario.
Del total subastado, 178 millones de dólares fueron adjudicados a empresas y 32,2 millones a ciudadanos, detalló un comunicado del BCV.
La institución no reveló, como tampoco en las otras dos subastas, ni el precio de venta del dólar ni las empresas o personas beneficiadas.
Venezuela mantiene un control de cambios con una cotización oficial de 6,30 bolívares por dólar, pero la moneda estadounidense es prácticamente inaccesible, lo que fomenta un mercado paralelo en el que la tasa oficial se quintuplica.
En esta subasta fueron convocadas firmas de los sectores de comercio y manufactura de juguetes, librerías y papelerías, de repuestos, partes y componentes para informática.
Los particulares a quienes se adjudicaron dólares para viajar –de turismo, estudios o por salud– fueron 29.981, la gran mayoría en montos de 1.000 dólares en promedio, con un límite de 2.500.
En la subasta del pasado 17 de julio, se vendieron 215,3 millones de dólares a un precio estimado por analistas de 11,7 bolívares por dólar para los ciudadanos y de 10,9 para las empresas.
Estas subastas -la primera realizada en marzo por 200 millones- se enmarcan en el Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad) y complementa a la Comisión de Admnistración de Divisas (Cadivi), hasta ahora el único mecanismo legal para acceder a dólares y euros.
La oposición y algunos sectores privados señalan que el Sicad es «poco trasparente» pues no informa sobre los beneficiarios ni el precio de venta del dólar, y consideran que es una nueva devaluación de facto.
El pasado 8 de febrero, en una medida gubernamental, el bolívar perdió casi el 32% de su valor, al pasar de 4,3 a 6,3 bolívares por billete verde.
La falta de divisas es una de las causas de la escasez cíclica de productos básicos en Venezuela, agudizando la tasa de inflación, en 2012 de 20,1%, las más altas de América Latina.
