Se duplica atención a extranjeros en casos de trata de personas en Perú
EFE
Las atenciones a ciudadanos extranjeros en programas de apoyo a víctimas de trata de personas en Perú se han duplicado en los últimos dos años, informó este miércoles la organización CHS Alternativo, que afirma que el perfil de quienes sufren esta problemática ha cambiado en el país.
«El perfil de las víctimas de trata de personas ha cambiado. Según el Programa de Protección y Asistencia a Víctimas y Testigos del Ministerio Público, en los últimos dos años, tras la pandemia y el fenómeno migratorio, las atenciones por este delito a víctimas y personas afectadas de nacionalidad extranjera se duplicaron en el país», indicó la organización en un comunicado.
Detalló que, mientras que entre 2020 y 2021 se registraron 286 atenciones a ciudadanos de otras naciones, entre 2022 y 2023 la cifra aumentó a 566 personas.
La psicóloga ecuatoriana especializada en temas de explotación humana y colaboradora de CHS, Verónica Supliguicha, señaló durante una actividad académica celebrada en Lima que el delito de trata de personas también se ha visto modificado por el avance significativo de las organizaciones criminales.
La experta destacó que las afectadas por la trata de personas son cada vez personas más jóvenes, que en muchos casos son captadas desde los 12 años y sometidas a explotación sexual y otras actividades delictivas, como la venta de drogas, extorsión o narcotráfico, razón por lo que es urgente reforzar y modificar las metodologías que se aplican para la atención de casos y el proceso de reintegración social.
«Cuando hablamos de la atención y soporte de víctimas de trata de personas nos referimos a que debemos fortalecer la reintegración. Este proceso debe ser distinto para cada una, especialmente en las personas que vienen en un contexto de movilidad, pues muchas veces se ignoran los códigos sociales de las comunidades de acogida y lo único que conocen las víctimas son las situaciones de explotación que vivieron”, sostuvo Supliguicha.
Añadió que hay elementos que pueden garantizar la reintegración social de las sobrevivientes, como establecer un proyecto de vida, fortalecer los vínculos con la comunidad, las capacitaciones formales para el empleo, la atención en salud y nutrición, así como actividades psicocorporales y el fortalecimiento de las habilidades blandas.
Esto con el fin de devolverles la autonomía y confianza que necesitan para poder enfrentarse al mundo.
Asimismo, concluyó al afirmar que los gobiernos deben tener un presupuesto adecuado para asegurar espacios de refugio y la contratación de profesionales que puedan garantizar para las víctimas un tratamiento adecuado, cuyo enfoque de atención sea especializado de acuerdo a su edad, el tiempo y el tipo de explotación al que fueron sometidas.
Según cifras de CHS, un total de 4.027 víctimas de trata de personas fueron atendidas entre 2019 y 2022 por el Programa de Víctimas y Testigos del Ministerio Público, de las cuales el 82 % fueron víctimas, el 17 % testigos y el 1 % familiares de las afectadas. EFE