Sanders vence en Washington, Alaska y Hawai y mantiene presión sobre Clinton
AFP
El senador Bernie Sanders consiguió el sábado importantes victorias en los caucus del partido Demócrata en Washington, Alaska y Hawai, resultados con los que mantiene la presión sobre la favorita, la exsecretaria de Estado Hillary Clinton.
De acuerdo con las proyecciones, Sanders aplastó a Clinton al obtener el 76% de los votos en Washington y el 79% en Alaska, aunque este último territorio sólo aporta 16 delegados para la convención partidaria en la que se decidirá el candidato demócrata que concurre a las elecciones presidenciales.
Según NBC News y otros medios, Sanders obtendría el 71% de los votos en el caucus de Hawai (25 delegados), contra el 29% logrado por Clinton.
En particular, la victoria en Washington era considerada esencial por el comité de campaña de Sanders, porque otorga mayor número de delegados (101) a la convención partidaria y el senador necesita reducir la desventaja que lo separa de Clinton en este rubro.
Gracias a las tres victorias consecutivas del sábado, Bernie Sanders, se mantiene en la carrera aunque sigue claramente distanciado por Hillary Clinton.
Hasta el sábado, Clinton contaba con el voto de 1.711 delegados, incluyendo en esa cuenta a los «superdelegados», funcionarios partidarios y legisladores que tienen asegurado su derecho a votar en la convención.
En comparación, Sanders era apoyado por 952 delegados, según una estimación de la red CNN.
Un «momentum» para Sanders
«¡Gracias Alaska! Juntos estamos enviando un mensaje de que este gobierno nos pertenece a todos», escribió Sanders en Twitter.
«¡Washington, gracias por su apoyo enorme! Es difícil para cualquiera negar que nuestra campaña tiene su ‘momentum'», expresó en otro mensaje.
«Estamos haciendo significativos avances (para cuestionar) el liderazgo de la Secretaria Clinton, y tenemos un camino hacia la victoria», dijo el senador de Vermonyt más temprano el sábado en un discurso en Madison, en el estado de Wisconsin.
Según Sanders era previsible que su campaña tuviera «momentos difíciles políticamente en los estados del Sur del país. Se trata de una región muy conservadora en nuestro país».
Sin embargo, «sabíamos que las cosas cambiarían una vez que la campaña se moviera hacia los estados del oeste del país», expresó.
Como el partido Demócrata distribuye sus delegados en forma proporcional, Sanders precisaba vencer en primarias por un enorme margen para reducir su desventaja, ya que aún en la derrota, Clinton sigue sumando delegados para la convención partidaria, que se celebrará a fines de julio en Filadelfia para decidir el candidato a la presidencia del país.
Según un sondeo de RealClearPolitics, en los restantes estados con mayor distribución de delegados (California, Nueva York y Pensilvania) Clinton tiene una ventaja que oscila entre los nueve puntos porcentuales (entre los californianos) y 34 puntos (entre los neoyorquinos).
Un simbolismo escondido
Sanders protagonizó un momento casi mágico el viernes cuando un pájaro bajó sobre el escenario y se instaló sobre el atril, junto al micrófono que usaba para dirigirse a la multitud.
El senador interrumpió su discurso unos instantes mientras la multitud estallaba en una ovación. «Creo que debe de haber algún simbolismo en esto», comentó en medio de carcajadas.
El candidato, quien plantea una revolución política en Estados Unidos, citó encuestas que lo señalan como holgado ganador si compite contra el republicano Donald Trump en las presidenciales de noviembre.
«Pensar en Trump en la Casa Blanca provoca extrañas reacciones (…), que generan náuseas y otros síntomas. Pero la buena noticia es que Donald Trump no será presidente de Estados Unidos», afirmó.
Por su parte, Clinton esperaba obtener un resultado honroso en Washington, donde hizo campaña el martes con apoyo de su esposo, Bill, y su hija, Chelsea.
Washinton no ofrece un público fácil a los Clinton: en 2008, Barack Obama ganó holgadamente en ese estado a Hillary Clinton, y en 1992 Bill Clinton terminó cuarto allí.
Las próximas semanas serán relativamente más tranquilas en estas primarias. En abril habrá primarias en Wisconsin (el 5), Wyoming (el 9) y Nueva York (el 19), antes de un nuevo «supermartes» el día 26, con primarias en cinco estados.