Rusia tiene cerca de 6.500 prisioneros ucranianos, según Shoigú
EFE
Cerca de 6.500 militares ucranianos fueron capturados por el Ejército ruso en el marco de la campaña en Ucrania, informó hoy el ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, en una reunión con la plana mayor de las Fuerzas Armadas.
«Durante los últimos cinco días se entregaron 126 militares de las Fuerzas Armadas de Ucrania, el número total asciende a 6.489 personas», afirmó el titular de Defensa.
Shoigú confirmó que las tropas rusas tienen total control de las zonas residenciales de Severodonetsk, el último bastión del Ejército ucraniano en Lugansk, y que el Ejército ruso continúa su ofensiva en la región de Popasna, con el fin de cerrar el cerco de las fuerzas ucranianas.
Según el ministro, en Severodonetsk continúa la ofensiva para controlar la zona industrial, donde se han refugiado las tropas ucranianas.
En total, afirmó Shoigú, «a día de hoy ha sido liberado el 97 % del territorio de la república popular de Lugansk», reconocida por el Kremlin.
«Ha sido liberada parte considerable de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk por la ribera izquierda de (el río) Séverski Donets, incluyendo las ciudades de Krasni Limán y Sviatogorsk, así como otras 15 localidades», dijo.
El ministro destacó las labores de reconstrucción iniciadas en los territorios bajo control ruso, al señalar que «Ferrocarriles de Rusia (RZD) con el apoyo del Ministerio de Defensa de Rusia creó las condiciones para reanudar el tránsito ferroviario entre Rusia, Donbás, Ucrania y Crimea por seis tramos ferroviarios».
«Comenzamos el transporte de carga a Mariúpol, Berdiánsk y Jersón», añadió, al destacar que se trata de 1.200 kilómetros de ferrocarril.
Además, destacó que el puerto de Mariúpol (mar de Azov) comenzó a recibir barcos de carga.
«Concluyó el desminado del puerto de Mariúpol. Funciona normalmente y ha recibido los primeros barcos», indicó.
Según Shoigú, tanto en Mariúpol como en otras regiones ucranianas del Donbás bajo control ruso «continúan implementándose medidas para que la vida vuelva a la normalidad».
«En Mariúpol se restablece paulatinamente el abastecimiento con agua y electricidad de los barrios residenciales, se limpian las calles y comenzaron a funcionar las primeras instituciones sociales», afirmó.
Respecto a la acería Azovstal, refugio de los últimos defensores de la ciudad hasta que se entregaron a las tropas rusas, aseguró que la instalación fue totalmente desminada.
«Continúan las labores de desminado. En total han sido revisadas alrededor de 3.000 hectáreas y desactivados casi 15.000 artefactos explosivos. El territorio de la fábrica Azovstal ha sido totalmente limpiado, incluyendo las instalaciones subterráneas», dijo.