Rusia: Radiación es estable tras incendios en torno a planta de Chernóbil
EFE
El organismo ruso encargado de la protección del consumidor, Rospotrebnadzor, afirmó hoy que la situación de radiación en Rusia es «estable» después de que Ucrania denunciara graves incendios en la zona de exclusión de la planta nuclear de Chernóbil, ocupada por Rusia en los primeros días de la campaña militar.
«En relación con los incendios en la zona de exclusión de la planta de energía nuclear de Chernóbil, Rospotrebnadzor está monitoreando la situación de radiación en Rusia en las áreas fronterizas», indicó el organismo en un mensaje en su cuenta oficial de Telegram.
«Según los datos de seguimiento, la situación de la radiación en la Federación de Rusia se mantiene estable. La situación está bajo el control de Rospotrebnadzor», añadió.
La viceprimera ministra y ministra para la Reintegración de los Territorios Temporalmente Ocupados de Ucrania, Iryna Vershchuk, ha advertido de que la ocupación por parte de las tropas rusas de las instalaciones de la central nuclear de Chernóbil puede originar una catástrofe que no sólo afecte a los ucranianos.
«Los ocupantes siguen militarizando la zona de exclusión de Chernóbil. Esto presenta un riesgo muy serio de dañar las estructuras de aislamiento construidas sobre la cuarta unidad de la estación después de su explosión en 1986», sostuvo la ministra.
La responsable de los Territorios Ocupados aseguró que «tales daños conducirán inevitablemente a la entrada en la atmósfera de una cantidad significativa de polvo radiactivo y contaminarán no solo a Ucrania sino también a otros países europeos.
Además afirmó que, a través de la ciudad de Pripyat, a unos cientos de metros de las instalaciones de aislamiento de la central nuclear, los ocupantes rusos transportan diariamente decenas de toneladas de cohetes, proyectiles y municiones de mortero.
Mostró su preocupación por que «las fuerzas de ocupación rusas están utilizando cada vez más municiones viejas y de baja calidad, lo que aumenta el riesgo de su detonación, incluso durante la carga y el transporte».
Además, en la zona de exclusión se han desatado graves incendios que pueden tener consecuencias muy graves y que no pueden ser extinguidos precisamente porque los efectivos ucranianos no pueden entrar en la zona.
«Como resultado de la combustión, se liberan radionúclidos a la atmósfera, que el viento puede transportar a largas distancias, lo que amenaza los niveles de radiación no solo en Ucrania sino también en otros países europeos», advierte Vereshchuk.