Rusia prorroga el acuerdo de cooperación espacial con EEUU
EFE
El Gobierno de Rusia anunció hoy la prorroga del acuerdo de cooperación espacial con EEUU hasta el 31 de diciembre de 2030.
La decisión, firmada el pasado 29 de marzo por el primer ministro ruso, Mijaíl Mishustin, dio luz verde a la prórroga del acuerdo de cooperación entre ambos países sobre la cooperación en las investigaciones del espacio con fines pacíficos firmado el 17 de junio de 1992 y que venció el pasado 31 de diciembre de 2020.
El acuerdo fue prorrogado por medio de un intercambio de notas entre ambas partes, según consta en la orden del Gobierno publicada en el sitio web del Ejecutivo.
Se trata de la cuarta prórroga de dicho acuerdo, una de las principales herramientas legales que establecen las condiciones de la cooperación espacial ruso-estadounidense.
El Gobierno ruso constató que esta prórroga responde a los intereses de ambas partes y contribuirá «a la implementación efectiva de los proyectos espaciales conjuntos».
Aunque Rusia y EEUU cooperan desde hace décadas en el espacio con diferentes iniciativas, desde vuelos conjuntos de cosmonautas rusos y astronautas estadounidenses en naves de ambos países hasta la cooperación en el marco de la Estación Espacial Internacional (EEI), estas relaciones se han visto ensombrecidas por las políticas de sanciones de Washington.
En diciembre pasado el Departamento de Comercio de EEUU publicó en su página web una lista de 58 empresas e instituciones chinas y 45 rusas de «uso final militar» y que quedarán sujetas a una serie restricciones.
Entre las empresas rusas sancionadas se encuentran el fabricante de cohetes y aparatos espaciales «Progress» y TsNIIMass, al que está adscrito el Centro de Control de Vuelos Espaciales de Rusia.
El director general de Roscosmos, la agencia espacial de Rusia, Dmitri Rogozin, exigió a las autoridades de Estados Unidos anular, a fin de conservar la cooperación espacial entre ambos países, las sanciones adoptadas contra dos empresas rusas del sector.
El jefe de Roscosmos advirtió de que se trata de «sanciones dañinas, porque crean irritación y dificultades adicionales en la importante cooperación entre rusos y estadounidenses en el espacio, en particular en la EEI».
