República Dominicana aboga por solución «pacífica y democrática» en Venezuela
EFE
República Dominicana abogó ante la Organización de Estados Americanos (OEA) porque «cualquier acción» colectiva que se emprenda con respecto a la «hermana nación» de Venezuela, se haga en procura de contribuir a la búsqueda de una solución «pacífica, democrática y definitiva».
Así habló el canciller dominicano, Miguel Vargas Maldonado, ante la Asamblea General del organismo regional, ante la cual afirmó que su Gobierno quiere para Venezuela el fortalecimiento de su democracia, «y que la paz y la prosperidad» prevalezcan en la tierra de Bolívar.
«Y lo queremos, especialmente nosotros que como mediadores dedicamos meses a tender puentes entre las fuerzas políticas venezolanas», agregó el alto cargo en su discurso.
Vargas refirió que la comunidad interamericana «está en el deber» de contribuir a una salida pacífica en Venezuela.
«Una solución que debe estar apegada a los estándares de la democracia participativa y en la cual los protagonistas sean los propios venezolanos, pues solo a partir de sus propias acciones y decisiones pueden emanar soluciones a sus problemas», apuntó.
El diplomático caribeño recordó que su país fue anfitrión el año pasado de un diálogo entre el Gobierno venezolano y la oposición, del que lamentó resultara «imposible» vencer la «inexistencia de una voluntad real» de llegar a acuerdos entre las partes en conflicto.
El canciller dominicano advirtió que, en Venezuela, las tensiones no cesan y la crispación entre los actores políticos y económicos es permanente, lo que les «hace temer que en cualquier momento se pueda producir un quebrantamiento de la gobernabilidad».
Horas después de su discurso, República Dominicana votó a favor de una resolución tomada por la OEA que condena las elecciones del 20 de mayo, en las que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, fue reelegido como presidente, así como una petición para que el Gobierno permita el ingreso de ayuda humanitaria y para que se restaure «la plena autoridad» de la Asamblea Nacional (Parlamento), de mayoría opositora.
En un giro de la diplomacia dominicana, el voto de Vargas fue uno de los 19 que decidieron aprobar la resolución que abre las puertas a la suspensión de Venezuela de la OEA.
La resolución aprobada hoy fue impulsada por Estados Unidos y los 14 países del Grupo de Lima, un bloque que suma más del 90 % de la población americana: Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guyana, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía.
Esos 15 países votaron a favor de la resolución, grupo al que se sumó República Dominicana (aliado tradicional de Venezuela), así como Bahamas, Jamaica y Barbados, tres países caribeños que ya habían votado anteriormente a favor de pronunciamientos sobre Venezuela en la OEA.
La aprobación de una resolución sobre Venezuela sirve para establecer el criterio de legalidad y legitimidad del continente americano con respecto al Gobierno de Maduro y abre la puerta a una estrategia regional para cambios en las relaciones diplomáticas y la imposición de sanciones.
Lo más importante de la resolución sobre Venezuela es el punto sobre la suspensión del país del organismo.