Recursos para “recuperar” sistema eléctrico y de agua potable se quedan cortos en el presupuesto chavista
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La “inversión social” es, nuevamente, la principal premisa de la administración de Nicolás Maduro al hablar del presupuesto anual, que por primera vez en cinco años fue presentado ante la Asamblea Nacional (AN) como dicta la Constitución. Sin embargo, la magnitud de esos desembolsos puede distar dependiendo de cómo se mida.
Para 2022 el chavismo proyecta un presupuesto de más de 62.379 millones de bolívares, con recursos provenientes principalmente de ingresos petroleros “extraordinarios” (61 %), impuestos y tasas (20,8 %), endeudamiento (15,4 %) y regalía minera (2,8 %). Del total, 75% del presupuesto irá dirigido a cubrir gastos administrables de órganos y entes públicos, y 9,1% se utilizará en 38 proyectos financiados mediante endeudamiento.
En la Ley de Presupuesto Nacional para el Ejercicio Económico Financiero 2022 presentada por Delcy Rodríguez, y sancionada este martes por la AN tras una muy breve segunda discusión, se contempla que el monto que se desembolsará en proyectos por endeudamiento será de 5.662.491.000 bolívares, equivalente a más de 1225 millones de dólares de acuerdo con la tasa oficial.
De los 38 proyectos por endeudamiento estimados, 14 se relacionan con los servicios de agua y energía eléctrica, dos de los principales dolores de cabeza de los venezolanos por sus constantes fallas, con montos autorizados que llegan a los Bs. 3.319.678.000 ($718 millones). En 2022 el chavismo prevé desembolsar Bs. 2418 millones ($523 millones) por esa vía al Ministerio de Energía Eléctrica, monto ínfimo si se toma en cuenta que el desfalco y la corrupción en la industria hicieron que más de 4000 millones de dólares se dejaran de invertir durante años de bonanza.
Con información de TalCual
