Raúl Castro afirma en ONU que queda «largo» camino para normalización con EEUU
AFP | El presidente cubano Raúl Castro destacó el lunes en su debut en la Asamblea General de la ONU el acercamiento entre su país y Estados Unidos, pero advirtió que queda «un largo» proceso que solo concluirá con el fin del embargo.
«Tras 56 años de heroica y abnegada resistencia de nuestro pueblo, quedaron restablecidas las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos», señaló Castro desde el podio del hemiciclo de Naciones Unidas en Nueva York.
Raúl, primer mandatario cubano presente en la gran cita anual de la ONU desde su hermano Fidel en 2000, señaló sin embargo que «se anuncia un largo y complejo proceso hacia la normalización de las relaciones».
Este se alcanzará cuando se den ciertas condiciones, como «el fin al bloqueo económico, comercial y financiero» y «se devuelva a Cuba el territorio ocupado ilegalmente en la base naval de Guantánamo», dijo.
Otros puntos son el cese de «las transmisiones radiales y televisivas y los programas de subversión y desestabilización contra la isla» y se «compense» a Cuba por los «daños económicos que aún sufre».
«Mientras persista, continuaremos presentado el proyecto de resolución titulado ‘Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América a Cuba’,» agregó.
Castro realizó además una enérgica defensa de varios gobiernos latinoamericanos como los del venezolano Nicolás Maduro, del ecuatoriano Rafael Correa, de la argentina Cristina Kirchner por la cuestión de las Islas Malvinas y de la brasileña Dilma Rousseff.
El líder cubano se refirió por otra parte a la crisis de los refugiados en Europa, una «consecuencia directa de la desestabilización» de la OTAN en Oriente Medio y África del Norte, según explicó.
«La Unión Europea debe asumir sus responsabilidades con la crisis humanitaria», sostuvo.
Por último, se refirió al cambio climático que «pone en peligro la existencia de la especie humana», por lo que los Estados «deben asumir responsabilidades comunes», aunque remarcando que «no todos los países» son «responsables por igual».