Rafael Narváez: El régimen sepultó los DDHH
Nota de Prensa
El ex parlamentario, abogado defensor DDHH y coordinador de la defensa por los derechos civiles aseguró que el régimen venezolano se ha convertido en el primer violador de los DDHH de la región, mantiene una justicia politizada y paralizada vulnerando el debido proceso, derecho a la defensa y presunción de inocencia de 365 presos políticos que siguen en los centros de torturas del Sebin y el Dgcim sin un trato humanitario y despreciados por un sistema de justicia inhumano.
“El régimen predica que dentro de nuestra Constitución todo y fuera de ella nada que no ejecuta, es mentira el usa una Constitución de bolsillo, la población es víctima del hambre por la hiperinflación indetenible con sueldos miserables que solo alcanza para un cartón de huevos o un kilo de queso y esa situación sigue provocando un mayor desplazamiento forzado por el hambre de miles de venezolanos a otros países, donde siguen siendo víctimas de la xenofobia y el desprecio; como el reciente caso de Trinidad y Tobago donde 24 venezolanos, incluidos 16 niños, fueron lanzados por el gobierno de la isla al mar sin que el canciller del régimen, Jorge Arreaza y el equipo consular asumiera la defensa de nuestros hermanos”, destacó.
En este sentido, el coordinador de los derechos civiles denunció y responsabilizó al régimen “de haber sepultado los derechos humanos y garantías constitucionales de los ciudadanos en fosas comunes clandestinas, la vida de los venezolanos la decide el grupo exterminio Faes, la libertad personal cuerpos de seguridad encabezados por el Sebin , Dgcim, la alimentación la hiperinflación, la salud el coronavirus, libertad de expresión Conatel y la garantías constitucionales y el debido proceso la injusticia de los poderes públicos”.
Para finalizar, el defensor DDHH Rafael Narváez afirmó que estamos en presencia de la tragedia más grande en materia de los derechos humanos que han sido víctima de un régimen que sigue estando impregnado de venganza, odio, resentimiento y les desprecia.