Puede que en determinados momentos notemos que nuestra velocidad de conexión disminuye o que, por ejemplo, la red es inestable y hay cuelgues sin ningún tipo de razón aparente. Estos son pequeños indicativos que permiten identificar el momento exacto en el que el router necesita ser reiniciado.

La mayoría de usuarios esperan a que estos momentos ocurran para encender y apagar este aparato, pero también hay otra corriente de pensamiento que prefiere hacer este proceso cada cierto tiempo para no tener que frustrarse a la hora de utilizar internet y darse cuenta de que el router necesita un descanso.

Y, es que, no solemos ser conscientes de todos los procesos internos por los que pasa nuestro router. El principal ejemplo es el cambio de IP que hace la compañía cada cierto tiempo a nuestro router, si el dispositivo que tenemos en casa no administra este cambio lo más seguro es que empecemos a tener problemas de conexión.

Expertos en materia de redes incluso hablan de los beneficios de un reinicio cada periodo de dos meses, no es una cifra a la que hayan llegado mediante un estudio especifico. Pero hablan de que, al tener muchos aparatos conectados, es común que los problemas se vayan acumulando hasta que de verdad sean notorios.

El reiniciar el router cada dos meses permite evitar sentir estos problemas. Eso sí, el reinicio del router no solo es beneficioso para mejorar nuestra conexión o la estabilidad de la red; también es capaz de protegernos de malware especifico. El propio FBI recomienda reiniciar el router para interrumpir cualquier tipo de ataque que esté ocurriendo.

En la actualidad no es necesario reiniciar el router de manera manual, los routers más modernos cuentan con aplicaciones móviles en las cuales podemos programar reinicios cada cierto tiempo. Así que si estás buscando cambiar un router lo más recomendable es apostar por uno de última generación.

Con información de ComputerHoy