Polémica en Brasil por comentario de un hijo de Bolsonaro sobre el Supremo
EFE
Eduardo Bolsonaro, uno de los hijos del candidato presidencial ultraderechista Jair Bolsonaro, fue protagonista de una polémica por decir que basta con mandar «un soldado y un cabo» para cerrar la Corte Suprema de Brasil, durante un conferencia pasada rescatada en redes sociales y medios.
En un video grabado antes de la primera vuelta de las elecciones, Eduardo Bolsonaro responde a una persona que pregunta si el Ejército podría actuar sin ser llamado, en caso de que su padre fuera impedido de asumir por alguna decisión de la máxima corte del país.
«El personal hasta bromea allí: si uno quiere cerrar el STF (Supremo Tribunal Federal), uno no manda un yip, manda un soldado y un cabo. Sin desmerecer al soldado y al cabo», respondió entonces.
Eduardo Bolsonaro se convirtió en el diputado federal más votado de la historia de Brasil tras las elecciones legislativas del 7 de octubre, en las que fue reelegido por el estado de Sao Paulo.
El video fue grabado el pasado 9 de julio durante una conferencia en una conferencia en la ciudad de Cascavel, en el estado de Paraná (sur), pero solo este domingo comenzó a circular en redes sociales y los medios de comunicación, generando una gran polémica.
El primero en condenar el comentario fue el candidato progresista Fernando Haddad, del Partido de los Trabajadores (PT), quien se medirá a Jair Bolsonaro el 28 de octubre en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales.
«Esas personas son una milicia, no es un candidato a presidente, es un jefe de milicia, sus hijos son milicianos, son matones, es gente de quinta categoría, esa es la verdad», expresó hoy en una rueda de prensa en Sao Luis, en el estado de Maranhao (nordeste).
Por su parte, el capitán en la reserva del Ejército dijo este domingo ante los medios que desconoce el video, pero que seguramente «alguien sacó de contexto» las declaraciones de su hijo.
«Eso no existe. Si alguien habló de cerrar el STF, necesita consultar un psiquiatra. Lo desconozco, lo dudo. Alguien lo sacó de contexto», aseguró el aspirante del Partido Social Liberal (PSL).
La presidenta del Tribunal Superior Electoral (TSE), la jueza Rosa Weber, que es además magistrada en el Tribunal Supremo, afirmó que «las instituciones están funcionando normalmente» y que «todos los jueces honran la toga y no se dejan intimidar con cualquier manifestación».
Por otro lado, el expresidente brasileño Fernando Henrique Cardoso (1995-2002) subrayó en redes sociales que las declaraciones de Eduardo Bolsonaro «merecen repudio de los demócratas».
«Predica la acción directa, amenaza al STF. No apoyo chicanas contra los vencedores, pero estas cruzaron la línea, huelen a fascismo. Tienen mi repudio», escribió el exmandatario en su perfil de Twitter.
La Presidencia de Brasil será definida en una segunda vuelta en la que se medirán Bolsonaro, un nostálgico de la dictadura militar (1964-1985) y Haddad.
Según la más reciente encuesta, divulgada este jueves, Bolsonaro ganaría el balotaje con un 59 % de los votos válidos frente al 41 % que obtendría Haddad, heredero político de Lula, impedido de concurrir en las elecciones por su situación jurídica.