Poder y miseria: Una de las grandes ironías de la actual Venezuela
800Noticias
Una valla donde se muestra a un eufórico Rafael Lacava, recién electo gobernador del estado Carabobo, refleja con toda la contundencia de la realidad una de las tantas ironías de la actual Venezuela.
La imagen, tomada por un ciudadano anónimo en alguna avenida de la entidad central, capta de manera providencial al nuevo mandatario regional en un gesto efusivo, probablemente tras haber ganado la elección del pasado 15 de octubre, pero que parece apuntar con desparpajo a un desamparado que deambula indiferente.
Este ciudadano en situación de calle con toda seguridad sobrevive a la crisis a duras penas, y quién sabe por cuánto tiempo más podrá aguantar en un país inmerso en la hiperinflación, el autoritarismo, la pobreza y la descomposición social.
Un aviso propagandístico de este tamaño vale miles de bolívares, millones si se multiplican por otros similares que abundan por el estado. Una cantidad suficiente como para atender a decenas o centenares de venezolanos desamparados. Tremenda ironía.
