Pionyang dispara misiles tras sugerir a Washington que quiere diálogo
EFE
Corea del Norte disparó hoy dos proyectiles de corto alcance en un momento en que el Pionyang y Washington parecen estar acercando posiciones con vistas a retomar, hacia finales de septiembre, el diálogo sobre desnuclearización.
El ensayo del régimen norcoreano se produjo tan solo horas después de que la viceministra de Exteriores, Choe Son-hui, dijera que Corea del Norte ve con buenos ojos acordar una fecha para sentarse a hablar con representantes de la Casa Blanca a final de mes.
Sin embargo, y en un gesto que algunos interpretan como la enésima acción norcoreana para añadir presión y acelerar el inicio de las conversaciones, el Ejército del aislado país asiático lanzó los dos proyectiles poco después del comunicado de Choe que emitió la agencia estatal KCNA.
El Estado Mayor Conjunto surcoreano, por su parte, informó de que Pionyang disparó a modo de prueba «dos proyectiles de corto alcance no identificados» hacia el Mar de Japón (Mar del Este para las dos Coreas) desde la localidad de Kaechon (75 kilómetros al norte de Pionyang) a las 6.53 y 7.12 hora local (21.53 y 22.12 GMT del lunes, respectivamente).
Los proyectiles -Seúl evitó confirmar que se trató de misiles mientras la inteligencia estadounidense y surcoreana continuaban analizando las «especificaciones adicionales» de lo testado hoy- recorrieron unos 330 kilómetros y alcanzaron un apogeo de entre 50 y 60 kilómetros.
El propio Estado Mayor y el Consejo de Seguridad Nacional surcoreano, que celebró una reunión de emergencia tras conocerse el ensayo, condenaron la acción e instaron a Pionyang a no repetir gestos que contribuyen a elevar la tensión regional.
Este es el décimo ensayo de armas norcoreano en lo que va de año, después de que el régimen de Kim Jong-un estuviera 17 meses sin realizar una sola prueba de este tipo mientras se embarcaba en las primeras rondas diplomáticas con EEUU.
«Estamos dispuestos a sentarnos con la parte estadounidense para mantener discusiones exhaustivas sobre los temas que hemos abordado hasta ahora, en una fecha y un lugar que deberán acordarse a fines de septiembre», explicó la vicecanciller Choe en el comunicado publicado antes del lanzamiento por la agencia KCNA.
El presidente de EEUU, Donald Trump, se pronunció sobre el texto en cuestión antes del ensayo de armas norcoreano, aunque no llegó a confirmar definitivamente que ambas partes vayan a reunirse aún.
«Veremos qué pasa, pero siempre digo que mantener reuniones es algo bueno, no algo malo», dijo a los periodistas congregados en la Casa Blanca.
La oferta norcoreana llega después de que el pasado 30 de junio Trump y Kim mantuvieran una cumbre informal e improvisada en la frontera intercoreana, en la que acordaron que retomarían las negociaciones técnicas para alcanzar un acuerdo sobre la desnuclearización de la península.
Sin embargo, más dos meses después ambas partes siguen sin haberse reunido.
Entre medias, el régimen realizó ocho lanzamientos de misiles, principalmente a modo de protesta por unas maniobras militares estivales realizadas en el Sur por Seúl y Washington.
Choe, en el comunicado, se mostró confiada en que EEUU «dará con una propuesta acorde» con los intereses de Pionyang y basada en un «método de cálculo aceptable» para el régimen, y al tiempo advirtió de que las negociaciones bilaterales «podrían llegar a su fin» de no cumplirse estos preceptos.
En cualquier caso, y pese a unos lanzamientos de misiles que parecen destinados a inquietar más a Seúl y a Tokio que a Washington, se cree que las palabras de Choe indican que Pionyang está dispuesto a volver a la mesa tras un verano marcado por su beligerante condena de los ejercicios conjuntos.
El secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, consideró el fin de semana que Trump «quedaría muy decepcionado si el líder Kim no retorna a la mesa de negociación o realiza ensayos de misiles que van en contra de lo acordado» en referencia a una moratoria autoimpuesta por Pionyang, que lleva desde 2017 sin probar misiles de alcance medio o largo.
Se cree que si se retoman las conversaciones de trabajo próximamente, al frente de las mismas estarían el representante especial de EEUU para Corea del Norte, Stephen Biegun, y el exembajador norcoreano en Vietnam Kim Myong-gil.